Definición de Anís

El anís, cuyo nombre científico es Pimpinella anisum, es una planta herbácea anual que puede alcanzar los 60-80 centímetros de altura si las condiciones del terreno lo permiten. Tiene un tallo erguido y ramificado en forma cilíndrica en la parte superior, así como unas pequeñas flores blancas. Es una planta originaria de oriente incorporada por los árabes a la península ibérica y a otros zonas del Mediterráneo. Se cultiva a gran escala y España es uno de los primeros productores de fruto de anís. En menor cantidad se cultiva igualmente en Italia, Turquía y Bulgaria.

Como planta medicinal

Es una de las plantas medicinales más antiguas del mundo y existen pruebas que demuestran que el anís ya se cultivaba 2000 años antes de Cristo en Egipto. En Grecia se empleaba habitualmente como especia y planta medicinal. En cuanto a su composición hay que recordar que contiene un 3% de esencia en sus frutos y dicha esencia se compone de una sustancia llamada anetol, que le confiere su característico aroma. Al mismo tiempo, contiene azúcares diversos y ácidos orgánicos. Estos componentes le dan al anís varias propiedades curativas: es un expectorante que facilita la expulsión de gases, actúa como un tónico estomacal, aumenta la secreción de la leche en la mujer y en los animales y sirve para regular la menstruación. Esta planta se recomienda en casos de inapetencia, espasmos gastrointestinales, catarros, bronquitis y para favorecer la lactancia. Sin embargo, hay que indicar que si se administra en dosis excesivas puede resultar tóxica.

En cuanto a su administración se recomienda tomar anís en forma de infusión (una cucharada de fruto de anís en agua hirviendo para tomarla como bebida caliente).

Como licor

La planta del anís también se puede destilar a partir de las semillas y así obtener el licor de anís o aguardiantes anisados. El licor de anís puede ser dulce, seco o semi-seco dependiendo de la cantidad de azúcar empleada para su elaboración. Presenta un aspecto trasparente y tiene una alta graduación de alcohol (algunos anises alcanzan los 74 grados).

Como bebida alcohólica es muy tradicional en España y es habitual beberlo después de copiosas comidas para favorecer la digestión, acompañando al café, como aromatizante en cocktelería e incluso para dar sabor en algunas elaboraciones de repostería. En la actualidad algunas fábricas de anís continúan elaborándolo con los sistemas artesanales tradicionales.

El anís es una bebida tan arraigada en algunas zonas de España que sus botellas son empleadas como instrumento musical, pues su superficie es irregular y de esta manera se va rascando la botella con una cuchara metálica. En las celebraciones navideñas se cantan villancicos acompañados de este original instrumento musical.

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