Definición de Arpía

Los mitos griegos de la antigüedad están muy presentes en el lenguaje actual y en la cultura en general. El término arpía es un buen ejemplo de ello, pues las arpías eran unos extraños seres alados con aspecto de mujer y en el lenguaje corriente una arpía es una mujer perversa y que actúa con alguna intención maliciosa. En cuanto a la grafía de la palabra, hay que indicar que es válida tanto Arpía como Harpia.

Las arpías en los relatos mitológicos griegos

Las arpías eran hijas de Neptuno y fueron enviadas por éste para castigar a Fineo, rey de Bitinia, quien había mandado sacar los ojos a sus propios hijos por creer que iban a traicionarle, tal y como le hizo creer su segunda esposa, una mujer muy perversa llamada Idea. Así, para castigar el comportamiento injusto de Fineo, las arpías se presentaron ante él con un aspecto horrible, pues tenían el rostro de una mujer anciana y el cuerpo de un buitre. La aparición de las arpías en la vida de Fineo se hacía insoportable, ya que se dedicaban a corromper todos los alimentos que había a su alrededor. Los cuñados de Fineo se apiadaron de él y consiguieron que las arpías regresaran a su morada habitual, las islas Estrófades.

Con respecto al origen de las arpias hay distintas interpretaciones

Algunos consideran que estos seres mitológicos se refieren realmente a bandadas de langostas que devastaron los campos de cultivo de algunas islas griegas. Otras interpretaciones sugieren que las arpias eran seres imaginarios creados por la fantasía de los corsarios, quienes les atribuían poderes perversos.

En cualquier caso, las arpías nos recuerdan a otro ser misterioso, las sirenas. Mientras las arpías tienen un aspecto siniestro y provocan miedo y destrucción, las sirenas se caracterizan por su belleza y por su forma seductora de cantar. A pesar de su aspecto diferente, las arpías y las sirenas simbolizan los peligros asociados a las mujeres.

Otros seres mitológicos presentes en la cultura actual

La referencia a las arpías nos recuerda que en el lenguaje cotidiano son muchas las referencias a la mitología griega. De hecho, cuando estamos inspirados hablamos de las musas, nuestro punto débil es el talón de Aquiles y Cupido continua dedicándose a los asuntos amorosos.

Un insulto hacia las mujeres

En la tradición cultural machista hay muchos términos que descalifican a la mujer. Si un hombre dice que una mujer es una arpía está indicando que es alguien que actúa con maldad y de manera retorcida. Arpía equivale a calificativos como bruja o fiera.

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