Definición de Deísmo

En un sentido general, el concepto de deísmo equivale al de teísmo, es decir, cualquier doctrina que sostiene que existe Dios y, por lo tanto, opuesta al ateísmo. De hecho, tanto deísmo como teísmo comparten la idea de Dios como principio creador. Sin embargo, hay una diferencia entre ambos conceptos: según el teísmo la existencia de Dios se basa tanto en la fe como en la razón, mientras que para el deísmo la existencia de Dios es una cuestión estrictamente racional.

El deísmo como planteamiento filosófico

Si tomamos como referencia las religiones monoteístas, la existencia de Dios se fundamenta en una revelación de Dios a los hombres y a partir de ella se inicia una tradición religiosa, el judaísmo, el cristianismo o el islam. Según el planteamiento del deísmo, la idea de Dios se crea desde la propia razón humana y al margen de la revelación, de la fe y de los textos sagrados. Esto quiere decir que el deísmo parte del concepto de Dios como el principio originario del universo. En otras palabras, el Dios de los deístas es un Dios racional.

El deísmo como corriente filosófica inició en Francia en el siglo XVlll, también conocido como siglo de las luces. Para los deístas, los conceptos de pecado, milagro o redención no tienen ningún protagonismo para entender la idea de Dios. El Dios de los deístas es, de alguna manera, el Dios de todas las religiones.

Como postura intelectual el deísmo puede definirse como una religión laica

Es una religión porque aporta una visión global de la realidad y, al mismo tiempo, se parte de un Dios creador. Pero esta religión tiene un componente laico, ya que la idea de Dios no forma parte de ninguna tradición religiosa.

Desde un punto de vista filosófico el deísmo es un intento de combinar la razón humana y la existencia de un Dios creador. El deísmo conecta con tradiciones religiosas como el hinduismo o el budismo, pues en ambas hay un orden del universo similar a la concepción de los deístas. Así, para un budista la existencia del mal tiene relación con la falta de armonía espiritual en cada individuo (recordemos que para un cristiano el mal es una consecuencia del pecado original).

Distintas maneras de entender el deísmo

Los filósofos de esta corriente no presentan una única visión. Así, para algunos, hay un Dios que gobierna el mundo y castiga a los humanos cuando actúan guiados por el mal.

Para otros, en cambio, Dios es simplemente un principio que explica la realidad en su conjunto, pero rechazan la idea de que Dios intervenga en los asuntos humanos. En cualquier caso, según la visión deísta el origen de la vida se explica a partir de una ley natural activada por un creador.

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