Importancia del Efecto Invernadero
Título de Profesora de Biología
Durante las últimas décadas mucho es lo que se ha conversado y difundido acerca del cambio climático del planeta. Un cierto efecto invernadero es eventualmente mencionado entre los incesantes informes sobre el fenómeno que está transformando por completo el frágil equilibrio de los ecosistemas, pero ¿qué tanta importancia tiene este efecto invernadero realmente sobre dicho cambio?
Las radiaciones solares, en conjunto con las emanadas por la propia tierra, tienen la capacidad de generar calor, lo cual a su vez termina propiciando las condiciones particulares de temperatura según la región del planeta y la mayor o menor incidencia de los rayos solares. La presencia de una atmósfera alrededor de la tierra ofrece en este sentido un refuerzo considerable sobre este fenómeno. Además de permitirnos la existencia del oxígeno disponible para la respiración de la mayoría de seres vivos, la atmósfera se encuentra compuesta por un cúmulo muy variado de gases, los cuales, dependiendo de su propia composición molecular, pueden ofrecer un cierto grado de resistencia en contra de las ondas de luz e incluso las electromagnéticas.
Esta resistencia ofrecida por los gases de la atmósfera juega el papel más importante sobre los desplazamientos de las masas de aire, así como en el incremento de la temperatura total de la tierra, de allí que se lograra demostrar el hecho de que la mayor acumulación de gases que obstruyan el flujo natural de los rayos y la disipación del calor, está afectando considerablemente las dinámicas fenomenológicas terrestres.
A mayor densidad de lo que actualmente se denominan como gases de efecto invernadero, menor será entonces la disipación del calor acumulado en una determinada región e incluso de todo el planeta, haciendo a su vez que se incremente progresivamente la temperatura por exceso de radiación absorbida por estos mismos gases, con una también creciente reducción de la liberación de calor hacia el exterior, de allí que todas las preocupaciones sobre el cambio climático apunten hacia una intervención masiva sobre el incremento de los gases de efecto invernadero, tales como el mayormente mencionado dióxido de carbono.
Beneficios a pequeña escala
El montaje de un invernadero en casa permite el desarrollo de un cultivo a pequeña escala con mucha eficiencia, con el cual se puede controlar múltiples variables tales como: 1) la humedad presente en el ambiente, reduciendo la cantidad de riego necesario; 2) la temperatura evitando sus cambios extremos; 3) la cantidad de luz que pudiese en exceso y de forma muy directa deteriorar las especies de plantas que requieren ambientes sombreados y 4) los insectos y agentes patógenos que pueden atacar a las plantas causando daños en el cultivo. Todo esto como resultado de los procesos de observación que la humanidad ha generado, con respecto a los diversos fenómenos que se presentan en una mayor escala y de manera constante en toda la tierra.
Todo en exceso es malo
Las consecuencias a largo plazo por el incremento del efecto invernadero se proveen como potencialmente catastróficas, sin embargo, este fenómeno no está siendo experimentado por primera vez en nuestro planeta, es de hecho un evento que ha tenido cierta frecuencia cíclica y, ciertamente, siempre con importantes consecuencias sobre las especies que pudieron estar presentes a lo largo de ese período.
Grandes extinciones masivas de todo tipo de especies, con mayor proporción en aquellas de más grandes dimensiones, importantes cambios geológicos consecuentes de abruptos fenómenos atmosféricos como huracanes, terremotos y tsunamis, así como largos períodos de glaciación han sido parte de las consecuencias evidenciadas de los diversos procesos de cambio climático en el planeta, por ende, no es de extrañar la enorme preocupación que gira entorno a este tema y a la necesidad de no escatimar recursos, para minimizar el impacto negativo que la actividad humana ha generado, en contra de la estabilidad de la temperatura terrestre y la composición atmosférica a lo largo de los últimos siglos.
Muchas alteraciones ya se han comenzado a manifestar y con ellas las afectaciones ecológicas en la mayoría de los ecosistemas, especialmente en aquellos de más bajas temperaturas, donde se reportan a diario las cifras del volumen de las capas de hielo descongeladas, las cuales a su vez terminan incrementando el volumen de los océanos, y con masas de agua que por alteración de sus características fisicoquímicas comienzan a representar un peligro para sus propios habitantes, como sólo algunas de las consecuencias directas en el incremento del efecto invernadero que hemos producido.
Referencias
Caballero, M., Lozano, S., & Ortega, B. (2007). Efecto invernadero, calentamiento global y cambio climático: una perspectiva desde las ciencias de la tierra. Revista digital universitaria, 8(10), 1-12. México.
Martínez, J. & Fernández, A. (2004). Cambio climático: una visión desde nMéxico. Instituto Nacional de Ecología. México.
Trabajo publicado en: Mar., 2014.
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