Importancia de los Hábitos
Título de Profesora de Biología
La vida moderna está repleta de situaciones nuevas que enfrentar a cada instante y cuya confrontación nos exige mantenernos en constante aprendizaje, adaptación y desarrollo de las estrategias necesarias para aprovechar al máximo tanto el tiempo como las oportunidades, y que a su vez todo este exceso de actividad mental, física y emocional, impacte negativamente de la menor manera posible en nuestra calidad de vida, especialmente en la salud. Para poder lograr todo ello, implementar rutinas previamente estructuradas según las condiciones específicas de cada quien, se convierte en un acto imprescindible hacia la adopción de hábitos sanos que: 1) permitan establecer prioridades; 2) brinden claridad sobre las diversas necesidades que tengamos en nuestras vidas; 3) optimicen el tiempo y los recursos en pro de los mejores resultados; 4) nos guíen hacia la más saludable relación con nosotros mismos, las demás personas y las experiencias vividas.
Optimizar tiempo y recursos
El desgaste que nos supone una cotidianidad caótica y cambiante, por medio del estrés que representa el mantenerse en permanente estado de toma de decisiones, se ha convertido en una de las principales fuentes de perturbación de los estados psíquicos y físicos, impidiéndonos en muchas ocasiones rendir en las diversas actividades como quisiéramos, guiándonos silenciosamente incluso hacia el desarrollo de una variedad muy amplia de enfermedades, por lo que aprender a organizar las labores en función de la disponibilidad de tiempo y recursos, representa asumir una serie de nuevos hábitos imprescindibles que ayudarán a incrementar ese rendimiento físico y mental, pero también a mantener la claridad y control sobre los elementos que influyen en nuestro desempeño.
Sobre estas funciones, la adopción de estrategias como el manejo de una agenda personal y el establecimiento de algoritmos propios para el desarrollo de las actividades más rutinarias, son parte de las herramientas base que nos ofrecen un claro esbozo de lo que debemos hacer y lo que disponemos para poder lograrlo, por medio de una construcción plenamente personal, así que no existe una receta única y esto es justamente lo que hace que puedan convertirse en hábitos sanos para cualquiera que desee asumirlos, ya que podrán ser desarrollados según lo que cada quien necesite, por lo que también se transforman rápidamente en estrategias placenteras.
La escritura aporta grandes beneficios sobre la carga mental que nuestros propios pensamientos suelen generar, como consecuencia del exceso de estímulos a los que nos encontramos expuestos en la actualidad. Mantener siempre a nuestro alcance una libreta de apuntes o un cuaderno, para ir vaciando ahí las ideas en el momento que aparecen, es una poderosa herramienta que reduce drásticamente los niveles de estrés mental, producto de la presión de tener que recordar las cosas que nos puedan ser de mayor importancia, como por ejemplo las ideas sobre algo que deseamos realizar, las diversas soluciones a algún problema aún no resuelto y hasta las propuestas creativas más triviales o las más profundas reflexiones; absolutamente todo puede ser escrito y eso puede orientarnos hacia nuevas grandes oportunidades de explorar dentro de nosotros mismos el potencial que aún guardamos, a través de un sinnúmero de recursos personales con los cuales mejorar nuestras vidas en todos sus aspectos.
Constancia para la salud
Poder entonces mantener un estado de salud óptimo, se trata de una labor diaria para alcanzar y mantener el equilibrio entre las funciones de la mente y el cuerpo, continuidad que se logra por medio de los hábitos, entre los cuales se incluyen también la realización de actividades físicas deportivas y recreativas, la meditación y la alimentación saludable.
Ser constante en la práctica de los hábitos que se deseen adoptar en pro de la salud, es lo que permitirá alcanzar el efecto acumulativo de los beneficios obtenibles que puedan aportarnos, pero también será lo que haga posible que se sigan manteniendo a través del tiempo, sustentando de un modo mucho más fácil y práctico nuestro estado de salud en cada una de las etapas de la vida.
Disciplina para el éxito
Tener hábitos sanos sobre nuestro propio desempeño diario nos permite también alcanzar los objetivos que nos podamos plantear. En este sentido, asumir con disciplina el desarrollo de un paso a paso claro en nuestro proceder, por medio de los hábitos organizacionales, es lo que las personas exitosas describen siempre como su fórmula elemental para alcanzar el éxito en lo que sea que se desee, convirtiéndose este en la actualidad, en el principal incentivo hacia la adopción de hábitos sanos para la mayoría de las personas.
Los hábitos son los que nos obligan a actuar siempre del mismo modo a horarios más o menos similares o en modos también similares. Por ejemplo, un hábito muy común de nuestro estilo de vida es desayunar antes de salir al trabajo o a la escuela, hábito que todos recomiendan para empezar correctamente el día.
Desarrollar costumbres es central para el crecimiento humano
A diferencia de lo que ocurre con los animales, que de igual modo tienen cierto nivel de rutina en sus vidas aunque no consciente, los humanos son seres rutinarios para los cuales el desarrollo de hábitos y costumbres es esencial. Así, desde niños se nos enseña a cumplir ciertos hábitos que pueden agruparse en diferentes categorías.
Por ejemplo, están los hábitos alimenticios que tienen que ver con comer a determinados horarios, comer en determinada forma o en la limpieza de los dientes luego de cada comida. Por otro lado, están los hábitos horarios que nos hacen comportarnos todos los días con determinada organización y que nos permiten ordenar el día a día. Estos son especialmente importantes para los niños porque si no se desarrollan desde pequeños (por ejemplo, ser puntual) pueden luego convertirse en un problema. También, están los hábitos de limpieza que nos acostumbran a realizar ciertas prácticas para mantenernos sanos y saludables ante determinadas situaciones (por ejemplo, lavarse las manos antes de comer).
Los hábitos y su dimensión cultural
Tal como lo señalamos, los hábitos son costumbres que todos los humanos desarrollamos en mayor o menor medida. Lo que nos hace diferentes es el tipo de tradiciones que cada comunidad implementa. Así, no son iguales los hábitos de comida, de comportamiento, de saludo, de respeto, de trabajo en países occidentales que en países orientales, como tampoco son iguales los hábitos que se desarrollan en países del Primer o del Tercer Mundo respecto a un sinfín de acciones.
Esto nos prueba que las actividades que realizamos, la forma, la rutina y la frecuencia con la que las hacemos dependen también de la cultura de la cual somos parte.
Referencias
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Ramos Monteagudo, A. M., Yordi García, M., & Miranda Ramos, M. D. L. Á. (2016). El envejecimiento activo: importancia de su promoción para sociedades envejecidas. Revista Archivo Médico de Camagüey, 20(3), 330-337.
Rodríguez, A., Goñi, A., & Ruiz de Azúa, S. (2006). Autoconcepto físico y estilos de vida en la adolescencia. Psychosocial Intervention, 15(1), 81-94.
Imágenes: iStock. kimberrywood – Luka Ažman
Trabajo publicado en: Ago., 2016.
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