Definición de Mecanizado

El proceso de mecanizado hace referencia a las distintas técnicas de transformación industrial de los metales. En este sentido, se trata de un proceso que forma parte del sector del metal y de la mecánica.

La idea principal del mecanizado consiste en convertir un trozo de metal en una pieza industrial. Para ello se realizan operaciones en las que se elimina y modifica el material. Así, un lingote o un barra metálica puede alterarse utilizando alguna técnica, como el arranque de virutas o la abrasión. Con este sistema se producen piezas con todo tipo de tamaños, formas y funciones.

Diferentes formas de mecanizar un metal

Para el arranque de virutas en los metales se utilizan herramientas como el torno paralelo, la fresadora, el torneado y el mecanizado electrolítico. La máquina más tradicional en este sector es el torno paralelo.

El mecanizado helicoidal es una técnica destinada a fabricar objetos con forma helicoidal, como sacacorchos, brocas, fresas o herramientas dentadas.

El mecanizado por abrasión consiste en el desgaste de piezas de metal que no han sido fundidas, tal y como ocurre con el forjado del acero o en algunas soldaduras.

La historia del mecanizado se remonta a la edad de piedra

Las primeras herramientas de piedra se obtenían tallando o puliendo y de esta manera se fabricaban puntas de lanza, adornos o flechas. Cuando el ser humano abandonó el nomadismo e introdujo la agricultura, se empezaron a fabricar utensilios a través de la cocción.

En la denominada edad de los metales se iniciaron las técnicas de fundición del metal, especialmente el cobre. No fue hasta la revolución industrial en el siglo XVlll cuando se produjo el siguiente salto cualitativo en el proceso de mecanizado.

La invención de máquinas de vapor y nuevas energías permitieron el desarrollo posterior de la industria del acero. A pesar de los innegables avances científicos, las distintas técnicas de mecanizado continuan siendo las mismas: tallar, cortar, perforar y tornear materiales.

En síntesis, las distintas máquinas y herramientas empleadas en el mecanizado evitan el esfuerzo humano y permiten crear todo tipo de piezas.

Un simple tornillo

Algunos tornillos pueden soportar varias toneladas de peso, tal y como sucede en los puentes metálicos o las turbinas eólicas. La mayoría de ellos están hechos a partir de una aleación de acero reforzado y carbono y luego son tratados con calor para que sean materiales resistentes. Para conseguir un tornillo se utilizan varios procesos de mecanizado. Entre ellos podemos destacar el forjado en frío o el fileteado para formar la rosca.

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