Definición de Roca Metamórfica
Licenciado en Biología
Las rocas metamórficas se forman por acción del metamorfismo, principalmente a partir de rocas sedimentarias, que son las que se forman por meteorización, erosión y sedimentación de las ígneas y metamórficas.
La corteza terrestre, o litósfera, está compuesta, esencialmente, por rocas. Las rocas son cuerpos sólidos formados por asociaciones de minerales. Es decir, que una roca puede contener uno o más minerales, a veces mezclados y otras veces no. El origen de todas las rocas de la Tierra es el mismo: el vulcanismo. Debajo de la corteza, existe una capa de roca fundida, el magma, que cuando asciende a la superficie a través de los volcanes, se enfría y se solidifica, dando lugar a un tipo de roca conocida como rocas ígneas. El nombre ígneo hace referencia al origen magmático de este tipo de rocas. A partir de allí, comienza el ciclo de las rocas, donde por diversos procesos las rocas cambian sus características y se convierten en otros tipos. Estos tipos son las rocas metamórficas y las rocas sedimentarias.
Usos de las rocas metamórficas
Las rocas metamórficas son, en general, rocas más duras y resistentes que las rocas sedimentarias, lo que las hace más aptas para sus usos en construcción de infraestructura, debido a su durabilidad y resistencia a la meteorización. Además, muchas de ellas tienen atractivos patrones de vetas y manchas.
El mármol, una roca formada por el metamorfismo de la caliza, es un material popular para pisos y revestimientos decorativos. También es muy usado en escultura.
La pizarra, formada por metamorfismo de las lutitas, es valorada por su brillo e intenso color oscuro, y también se utiliza como revestimientos decorativos. Además, la pizarra se divide fácilmente en láminas, formando las conocidas “lajas”, de amplísimo uso en arquitectura y paisajismo.
Las rocas más duras, como el gneis son usadas para la construcción de mesadas, adoquines y también para la producción de materiales triturados que se emplean en la construcción de carreteras y como agregado en el hormigón. La resistencia al desgaste de estas rocas las hace adecuadas para estas aplicaciones.
Metamorfismo
El nombre metamorfismo se le asigna a una variedad de procesos físicos que hacen que las rocas experimentan cambios en su estructura y composición mineralógica debido a condiciones de alta presión y temperatura (como las que existen debajo de la corteza).
En estas condiciones, algunos minerales de la roca pueden fundirse, mientras que otros permanecen en estado sólido. Esto se conoce como fusión parcial; pero existen otros procesos de metamorfismo además de la fusión parcial, como el realineamiento de los minerales por la intensa presión.
Si la roca se funde por completo, ya no se habla de metamorfismo.
Las rocas metamórficas son el resultado de este proceso y tienen características distintas a las de la roca originale, a la que se le da el nombre de protolito. Cualquier tipo de roca puede ser el protolito, ya sea ígneo o sedimentario.
El metamorfismo puede ocurrir en diferentes entornos geológicos en donde las rocas estén sometidas a altas temperaturas y/o presiones, como en los procesos tectónicos, la cercanía de un cuerpo de magma caliente o el enterramiento profundo de la corteza terrestre.
Según esto, existen tres tipos principales de metamorfismo: el metamorfismo de contacto, el metamorfismo regional y el metamorfismo dinámico. En función de cuán alterado resulta el protolito, se distinguen grados de metamorfismo.
Metamorfismo de Contacto
El metamorfismo de contacto ocurre cuando una roca se ve afectada por la cercanía de un cuerpo de magma caliente. En términos técnicos, esto se conoce como intrusión magmática, y hace referencia, justamente a que un volumen de magma se abre paso entre las rocas de la corteza. Este magma presiona las rocas sólidas y puede llegar a la superficie a través de las fisuras que se van abriendo por la presión o puede quedar en profundidad.
Este tipo de metamorfismo afecta una zona relativamente pequeña alrededor del magma intrusivo y ocurre a temperaturas altas pero a presiones relativamente bajas.
Las rocas más afectadas serán las que se encuentran en contacto directo con el magma: en esta zona habrá un metamorfismo de alto grado. A medida que nos alejamos del intrusivo, la intensidad del metamorfismo disminuirá hasta desaparecer. Esto da lugar a la formación de una aureola metamórfica o aureola de contacto.
Un ejemplo común de metamorfismo de contacto es la formación de mármol a partir de la caliza. El mármol se forma cuando las altas temperaturas provocan la recristalización del carbonato de calcio de la caliza, dando lugar a una roca más dura y resistente.
Metamorfismo Regional
Este tipo de metamorfismo afecta áreas mucho más extensas y está asociado con los procesos tectónicos, como la subducción y la formación de montañas.
Este tipo de metamorfismo se produce a gran profundidad, donde las presiones y temperaturas son extremadamente altas. En general, se trata de un metamorfismo más intenso que el de contacto, donde pueden aparecer rocas afectadas incluso por fusión parcial, que es un metamorfismo de muy alto grado.
Las fuerzas tectónicas comprimen, doblan y deforman grandes secciones de la corteza terrestre, generando rocas metamórficas a gran escala.
Los esquistos y gneises suelen ser los productos más frecuentes del metamorfismo regional. Son rocas muy resistentes y duras, con alto grado de metamorfismo. Si el protolito está sometido a una temperatura extrema, y ocurre fusión parcial, se forma una roca conocida como migmatita, que representa el máximo grado de metamorfismo.
Metamorfismo dinámico
Aquí, el factor principal de metamorfismo no es la temperatura sino el movimiento, lo que genera una presión direccional intensa que actúa sobre la roca, lo que en ocasiones produce una trituración mecánica.
Existe metamorfismo de contacto, por ejemplo, en las zonas de fallas geológicas, por lo que es un metamorfismo aún más limitado que el metamorfismo de contacto.
Si la trituración de la roca ocurre cerca de la superficie, donde la temperatura es baja, entonces lo que se forma es una roca llamada brecha de falla, mientras que si la trituración ocurre en profundidad, donde hay además, alta temperatura, se forma una roca conocida como milonita.
Trabajo publicado en: Jun., 2024.
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