Definición de Ruibarbo

Esta planta es originaria del oeste de China y en la actualidad se cultiva en todas las latitudes. El término ruibarbo proviene del vocablo en latín rhababarum, que quiere decir raíz de los bárbaros. Su nombre científico es Rheum rhapnticum y existen más de cincuenta especies distintas.

Una planta con propiedades medicinales

Las raíces y los tallos de esta planta contienen principios activos muy beneficiosos para el organismo. Es un antibacterial antifúngico que ayuda a mantener sana la piel.

También, es un antioxidante natural que permite neutralizar los radicales libres y por este motivo sirve para retrasar los síntomas del envejecimiento.

El ruibarbo contiene ácido oxálico y esta sustancia favorece la salud del cabello. Es una fuente natural de minerales, especialmente hierro, calcio y magnesio. Por otro lado, proporciona vitamina C, B y K y también ácido fólico. Las personas que quieren perder peso pueden consumirlo de manera complementaria a la dieta.

El conjunto de sus nutrientes permite mejorar la tasa de metabolismo del cuerpo y ayuda a reducir los niveles de grasa. Las personas con problemas de estreñimiento utilizan sus tallos como un laxante natural.

Se destaca, además, que reduce los riesgos de infección y es beneficioso para mantener una buena visión (su color rojo indica que contiene luteína, una sustancia utilizada en la industria farmacéutica para la salud ocular). Al contener una elevada cantidad de antioxidantes, esta planta es considerada anticancerígena.

En la medicina china tradicional se emplea esta planta para sanar dolencias de estómago y como purgante. En cuanto a su consumo, se toma normalmente en forma de infusión triturando las raíces secas. Para ello, hay que calentar agua hasta el punto de ebullición y una vez que el agua está hirviendo se le añaden las raíces de ruibarbo.

Si bien sus propiedades medicinales son evidentes, no es aconsejable que sea consumida por niños y por mujeres embarazadas.

Usos culinarios

Los tallos blandos y las flores son las partes del ruibarbo empleadas en la cocina. Las posibilidades culinarias de esta planta son muy amplias, pues con ella se pueden preparar mermeladas, salsas, sopas, bizcochos, tartas o macedonia de frutas.

Debido a su sabor amargo y ácido, es muy frecuente que vaya acompañada de azúcar para compensar su sabor. Como no es fácil mantenerla fresca, es conveniente que se conserve en el congelador.

Fotos: Fotolia – Diana Taliun / Kawasny221