Significado de agente geomorfológico Definición, geoformas, y principales referencias
Licenciado en Biología
Los agentes geomorfológicos son fuerzas que actúan sobre la superficie de la Tierra, transformando y moldeando las geoformas a lo largo del tiempo. Desde una perspectiva clásica, estas fuerzas incluyen el viento, los ríos, el océano, los glaciares y la gravedad; pero en los últimos tiempos es necesario incluir a la propia sociedad humana como un agente capaz de cambiar el paisaje y crear o destruir geoformas.
La superficie de la Tierra está en constante evolución, moldeada por fuerzas naturales que actúan en una escala de tiempo geológico. Estos cambios pueden parecer insignificantes en el tiempo de vida de una persona, e incluso imperceptibles, pero los efectos acumulados por miles de millones de años dejan marcas en el relieve terrestre, que es la parte superficial de la corteza terrestre o litosfera. A las formas del relieve les damos el nombre de geoformas, y el estudio de ellas está a cargo de la geomorfología. Estas fuerzas, conocidas como agentes geomorfológicos, son los escultores que le han dado forma al paisaje que nos rodea, y aún lo siguen haciendo. Cada agente posee características únicas que determinan la naturaleza de las transformaciones que induce en el paisaje. Los agentes naturales pueden actuar por erosión y producir geoformas de erosión o pueden actuar por sedimentación, y producir geoformas de sedimentación.
Geoformas de erosión y de sedimentación
La erosión es el proceso de desgaste y transporte de material de la superficie por los agentes geomorfológicos. Imagina un fuerte viento, que levanta polvo y arena de algunas áreas y las trasporta a otros sitios.
En las zonas donde el viento se llevó los materiales de la superficie, pueden aparecer cavidades llamadas cubetas de deflación, que son geoformas de erosión, porque se han generado por la acción erosiva de un agente geomorfológico.
Cuando el viento pierda velocidad, ya no podrá seguir trasladando esa arena, que se irán acumulando como medanos, o dunas. Allí se habrán generado geoformas de sedimentación, ya que son el resultado de la acción de trasporte y sedimentación de un agente geomorfológico.
Para las transformaciones antrópicas del paisaje (antrópico significa “generado por el hombre”), esta clasificación no tiene sentido.
Principales referencias y ejemplos de agentes geomorfológicos
El viento
La acción del viento es notable en las zonas áridas, con pocas lluvias, dado que al viento le cuesta más levantar la arena y el suelo húmedos que los secos.
La acción erosiva del viento se conoce como erosión eólica y ocurre cuando el viento levanta y transporta partículas sueltas, como arena y polvo.
Estas partículas suspendidas en el viento pueden actuar como una lija, y pulir las rocas. Las geoformas erosivas del viento suelen ser muy llamativas, como rocas con forma de hongo y pedestales.
El viento afecta a las rocas más blandas, que son las sedimentarias y como hemos dicho, se encuentran sobre todo en áreas áridas.
Estas partículas pueden viajar largas distancias y acumularse en dunas, médanos o depósitos de loess (depósitos de polvo), dando origen a las geoformas de sedimentación del viento. También son más evidentes de zonas áridas, y en la costa del mar; donde el viento arrastra la arena de las playas y suele formar cordones de dunas detrás de la playa.
Los ríos
La acción erosiva de los ríos se conoce como erosión fluvial. El agua en movimiento puede arrancar y trasportar todo tipo de materiales: desde rocas hasta fina arena.
La erosión fluvial puede afectar a cualquier tipo de roca, y es capaz de labrar profundos valles en V, cañadones, cárcavas y terrazas fluviales. Estas son las geoformas de erosión producidas por los ríos.
El Gran Cañón del Colorado es un testimonio del poder erosivo de los ríos a lo largo de millones de años. El rio Colorado ha ido erosionando las rocas sedimentarias de su lecho hasta formar un profundo desfiladero.
Entre las geoformas de sedimentación producidas por los ríos, podemos mencionar los abanicos aluviales, que son depósitos con forma de abanico que se forman cuando el río pierde su capacidad de trasportar material y lo deposita. La capacidad de trasporte depende sobre todo de la pendiente del terreno, y es común que estas acumulaciones se formen cuando los ríos salen de las montañas para ingresar en un terreno más llano.
El océano
El océano actúa a lo largo de las costas. La erosión costera o litoral se produce cuando las olas rompen contra la tierra, desgastando y transportando sedimentos. Entre las geoformas de erosión más conocidas generadas por el océano se cuentan los acantilados, los arcos marinos y las cavernas marinas.
Estas formas de generan por el incesante golpeteo de las olas contra las rocas.
Entre las geoformas de sedimentación, por lejos, las más conocidas son las playas, que se forman en los lugares donde el oleaje y las mareas depositan todo el material que transportan.
Los glaciares
Los glaciares son grandes masas de hielo que se mueven lentamente sobre la superficie de la tierra.
Son los agentes geomorfológicos con mayor poder erosivo y los relieves creados por los glaciares dan lugar a paisajes espectaculares. Montañas con picos puntiagudos, extensos lagos y depresiones semicirculares en las laderas son características del paisaje glaciar, que se puede observar en los andes australes de Argentina y Chile o en las montañas del hemisferio norte.
Las geoformas de sedimentación de los glaciares no son tan atractivas, pero es muy común una, que se asemeja a una pila lineal de escombros, denominada morrena.
La gravedad
La gravedad puede generar geoformas al hacer que caigan materiales desde las partes altas. Los hundimientos de tierra, desprendimientos de rocas y aludes son las formas en las que actúa la gravedad.
Estos procesos se conocen como procesos de remoción de masa, y el nombre hace referencia a que durante ellos, grandes cantidades de materiales son movilizados hacia abajo.
Por lo general, la gravedad siempre actúa en combinación con otro agente, que erosiona y debilita las rocas que luego caerán.
La humanidad
No podemos olvidar ni ignorar el rol de la humanidad en el cambio del paisaje y del relieve terrestre. La sociedad humana es un agente geomorfológico reciente pero cada vez más importante. Las actividades humanas, como la agricultura, la minería y la construcción, pueden transformar significativamente el paisaje.
La construcción de lagos artificiales altera el cauce natural de los ríos, y extensas áreas son inundadas.
Pero también modifican la fuerza del río para erosionar aguas arriba y aguas abajo del lago, por lo que el efecto de la construcción de un embalse puede extenderse mucho más allá que la propia área inundada.
La minería, sobre todo la minería a cielo abierto implica la eliminación de grandes cantidades de roca y suelo. En ocasiones, una montaña completa es destruida por la minería. Por procesos de erosión natural, una montaña tardaría millones de años en desaparecer.
La expansión de nuestras ciudades cubre grandes áreas de tierra con estructuras impermeables, como cemento y asfalto. Esto altera las vías de escurrimiento que sigue el agua y puede terminar aumentando el riesgo de inundaciones.
Reconocer a la sociedad como agente geomorfológico “nuevo” y analizar su interacción con los agentes naturales es fundamental para comprender los nuevos escenarios que nos plantea el cambio global que estamos viviendo.
Trabajo publicado en: Abr., 2024.
Referencias
Edward J. Tarbuck y Frederick K. Lutgens (2005). Ciencias De La Tierra: una introducción a la geología física. 8va ed. en español. Capítulos 15, 16, 18, 19 y 20. Pearson Educación: Madrid.Escriba un comentario
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