Definición de Astracanada

Astracanada o astracán, como también se lo denomina, es un subgénero teatral cómico que resultó ser muy popular en España, durante la primera mitad del siglo pasado.

La principal situación que determinó la aparición de este subgénero fue la crisis que atravesaban los tradicionales sainetes, es decir, no importaba si se hacía agua en materia de verosimilitud argumental, si se recurría constantemente al absurdo o si directamente no había calidad literaria, la misión era clara: reemplazar al sainete y hacer reír al público a como dé lugar.

Entre sus características más reconocibles se destacan: teatralización de la realidad misma, explotación de recursos como el retruécano (figura de repetición que consiste en reorganizar de manera diferente los elementos de una oración, en otra siguiente, de modo de generar contraste), las falsillas sentimentales, las situaciones disparatadas, deformaciones del lenguaje, juegos toscos de palabras, tipificación regional del habla, uso de nombres propios que dan paso al equívoco fácil y al chiste, o sea, todo cuanto sucede en la astracanada está supeditado al chiste.

En tanto, la figura más destacada de este su género cómico es el llamado fresco, un personaje sumamente ocurrente, que oscila entre lo costumbrista y cómico, llegando a alcanzar el perfil del pícaro que inventa situaciones o realidades, aunque sin maldad real y que siempre resultan ser descubiertas y ridiculizadas por el entorno.

Si bien la astracanada constituyó una propuesta artística sumamente popular durante aquellos tiempos mencionados, a la cual los públicos ávidos de diversión y evasión se volcaron fenomenalmente, en muy contadas ocasiones logró destacarse alcanzando nivel literario, por tanto, con el transcurrir del tiempo se fue desvaneciendo hasta prácticamente su desaparición como tal.

Las figuras más destacadas de este subgénero han sido Pedro Muñoz Seca (La venganza de Don Mendo, El verdugo de Sevilla y Los extremeños se tocan) y Pedro Pérez Fernández.