Definición de Criticismo

El concepto de criticismo forma parte de la terminología propia de la filosofía. Concretamente, el término criticismo alude al planteamiento filosófico de Kant en relación con la teoría del conocimiento. Este filósofo prusiano del siglo XVlll propuso un análisis crítico de los procesos mentales que intervienen en el conocimiento y de ahí viene la denominación de criticismo. En este sentido, hay que recordar que la obra de Kant que aborda este tema recibe el nombre de «Crítica de la razón pura».

En filosofía el concepto de criticismo hace referencia igualmente a las estructuras o formas a priori del conocimiento que intervienen en el proceso intelectual (por ejemplo, la idea de espacio y de tiempo).

Otro sentido del criticismo como idea es aquel que sostiene que la realidad no es posible conocerla plenamente y, por lo tanto, esto implica una posición crítica sobre nuestra capacidad de interpretar la realidad.

La idea fundamental del criticismo kantiano

Según el análisis de Kant el conocimiento humano es una síntesis entre la dimensión empírica del entendimiento y la dimensión racional, siendo lo empírico todo aquello que se conoce a través de la experiencia y lo racional todo aquello que es independiente de la experiencia sensible. Pongamos un ejemplo ilustrativo. Estamos viendo un paisaje y dicha visión depende inicialmente de nuestra agudeza visual y del tamaño de aquello que percibimos (hasta aquí intervendría la parte empírica). Sin embargo, para que podamos captar el paisaje es necesario que se den dos condiciones generales, la intervención del espacio y del tiempo como conceptos que participan en el proceso de asimilación de las imágenes (aquí es cuando actúa la parte racional no empírica).

Para Kant, el espacio y el tiempo son estructuras mentales del conocimiento (él las definía como formas a priori de la sensibilidad), lo cual quiere decir que en el proceso de conocer la realidad no toda la información proviene de los sentidos.

Conclusión sobre el criticismo kantiano

La teoría del conocimiento de Kant supuso la fusión de dos corrientes filosóficas hasta entonces antagónicas: el racionalismo y el empirismo. El criticismo kantiano tuvo la visión genial de fusionar ambas corrientes y así poder explicar el conocimiento humano. Para llegar a este tipo de conclusiones tuvo que realizar un análisis crítico de la razón y superar las limitaciones del dogmatismo racionalista y del escepticismo propio del empirismo.

Para comprender mejor el pensamiento de Kant hay que contextualizarlo en su época, el periodo de la Ilustración, una etapa en la que los intelectuales intentaron construir unos principios racionales libres de dogmas. Este nuevo rumbo del pensamiento tuvo consecuencias en la esfera de la filosofía y de manera muy especial en el ámbito científico.

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