Definición de Deterioro
En términos generales, el término deterioro refiere a la degeneración o empeoramiento gradual y progresivo que observa algo, ya sea un objeto, una situación, una persona, entre otros.
Principales razones del deterioro
En este sentido, la relación que alguien mantiene con otro puede caer en deterioro ante sucesivas faltas de incomprensión, cariño o muestras de afecto. También, un objeto, una ropa, pueden sufrir deterioro como consecuencia del paso del tiempo o bien porque no se lo ha cuidado con las precauciones y advertencias del caso, por ejemplo, en el caso de la ropa, un pantalón que se lavó a máquina a pesar de las recomendaciones de no hacerlo de esa manera, se deteriorará indefectiblemente por esa situación.
Cómo sobreponer al deterioro a los bienes materiales
Los objetos, la indumentaria, los muebles, las edificaciones, entre otros, más tarde o más temprano sufrirán el deterioro. Es algo típico y producto directo del paso del tiempo y también, como ya señalamos, de un cuidado deficiente del objeto o elemento en cuestión.
En el particular caso de los muebles y de las construcciones, es absolutamente posible restaurarlos y devolverles el esplendor que supieron tener sin que pierda su esencia e impronta original.
La mayor parte de los países disponen de zonas que ostentan un alto valor histórico y que como consecuencia de esa larga historia se encuentran deterioradas. Conservar estos espacios es una obligación de estado, por tanto, es muy importante que se destinen recursos a tales efectos.
Restauración, para ganarle al deterioro
A este proceso de recuperación se lo conoce popularmente como restauración y se ha vuelto una práctica muy común entre las personas, es decir, en el caso de los muebles, por ejemplo, ha dejado de ser una actividad profesional que despliegan personas que llevan hace muchos años el oficio adelante para pasar a ser desarrollado por personas que lo hacen como hobby.
Deterioro cognitivo
En tanto, si el objeto de ese deterioro es una persona, al mismo se lo refiere como el daño progresivo, que en mayor o menor grado observa una persona con respecto a sus facultades intelectuales o físicas. Este conjunto de fenómenos mentales que presentan deterioro puede deberse a una involución biológica propia de la vejez o bien a un trastorno patológico productor de la arterosclerosis, parálisis general, enfermedades mentales de larga data, intoxicaciones, entre otras cuestiones.
Un típico problema de salud en las personas
El deterioro cognitivo leve es uno de los deterioros más comunes que puede sufrir una persona. El mismo consiste en una entidad clínica anterior al estado de demencia. Los síntomas más comunes que el mismo ocasiona son pérdida de la memoria y una marcada alteración en cuanto a la posibilidad de desarrollar las actividades cotidianas. Estos síntomas suelen mantenerse a través del tiempo. Generalmente, este tipo de enfermedad suele presentarse entre los adultos mayores a los 65 años de edad y se podrá efectivamente diagnosticarlo cuando se presenten las siguientes condiciones: declive en el funcionamiento cognoscitivo durante el último año, evidencia de los mismos tras los exámenes clínicos pertinentes y ausencia de demencia.
Uno de cada diez pacientes que sufren este tipo de trastorno evolucionan hacia la demencia o enfermedad de Alzheimer, que es la forma más habitual de la demencia, sin embargo, un rasgo alentador es que en la mayoría de los pacientes esta dificultad no interfiere en el desarrollo de su vida cotidiana.
Como no existe un tratamiento farmacológico para curar este padecimiento, será fundamental, por un lado, el seguimiento profesional al paciente que observa este cuadro administrándole algún inhibidor como ser la colinestarasa para controlarlo y por el otro, que cuente con un importante soporte social y familiar que le ayude a sobrellevarlo.
Un difícil dilema familiar para lidiar
En este último aspecto debemos decir que no es sencillo y sin lugar a dudas, cuando de salud se trata, el tener un familiar que padece de deterioro cognitivo resulta una tremenda preocupación y ocupación para su familia, especialmente en aquellos casos en los que ese deterioro les imposibilita desarrollarse y manejarse de manera autónoma y tal como lo venían haciendo hasta antes de caer enfermos.
Por caso es que es muy habitual que los familiares de las personas que padecen este problema de salud recurran a la experiencia profesional de un cuidador o enfermera especializada en este tipo de cuadros clínicos para que se ocupe del familiar la mayor parte del día.
También existen institutos especializados en estas problemáticas de la salud que se encargan de albergar y de brindar los cuidados requeridos por este tipo de pacientes y así alivianar las vicisitudes que esto acarrea a la familia.
Trabajo publicado en: Oct., 2009.
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