Definición de Óxido
El concepto de óxido forma parte de la terminología que se emplea en la química. Un óxido básico es el compuesto que se obtiene cuando reacciona un metal y el oxígeno (por ejemplo, al reaccionar el hierro de una rueda de bicicleta con el oxígeno del aire se forma un óxido de hierro).
Los distintos compuestos se nombran con la palabra óxido seguida del nombre del metal, por ejemplo óxido de sodio, de aluminio o de calcio. Esto es así siempre y cuando el metal tenga solamente una valencia. En el caso de que el metal posea dos valencias se emplean la terminación oso para la menor y la terminación ico para la mayor (por ejemplo, el hierro tiene valencia 2 y 3 y si trabajamos con la menor el compuesto se llamará óxido ferroso y si trabajamos con la mayor el compuesto será conocido como óxido férrico).
Formulación química
Si presentamos una fórmula química, en su lado izquierdo nos referimos a un reactivo (un metal más el oxígeno) y en el lado derecho aparece el producto que se forma a partir del reactivo (por ejemplo, calcio + oxígeno = a óxido de calcio).
La transformación de un cuerpo debido a la acción del oxígeno es un fenómeno muy común y que afecta a aquellos objetos de metal que están al aire libre y que provocan un desgaste en los mismos, para lo cual se aplican sustancias antioxidantes.
En cualquier proceso de oxidación química hay una reducción, en el sentido de que una sustancia química pierde una serie de electrones. El desarrollo de la oxidación es variable en cuanto a la rapidez del deterioro, pero normalmente se trata de procesos lentos y que pueden afectar a un metal o al propio cuerpo humano.
La oxidación más allá de la química
Si bien el óxido es propiamente un proceso químico, en nuestro lenguaje cotidiano se utiliza este concepto con cierta frecuencia para referirnos al deterioro físico o mental, lo cual es igualmente una transformación química. Si una persona no tiene costumbre de ejercitar su mente y de pronto realiza un esfuerzo intelectual intenso puede afirmar que “tiene el cerebro oxidado”. Algo muy parecido ocurre cuando no se realiza ejercicio físico con regularidad, lo cual produce un efecto de desgaste y de deterioro funcional que es semejante a la oxidación.
Hay que tener en cuenta, que la oxidación aplicada al cuerpo humano se produce simplemente por el simple hecho de respirar y consumir energía, lo cual genera los conocidos radicales libres (que son las células causantes de la oxidación y que carecen de los electrones suficientes).
Trabajo publicado en: Abr., 2015.
Escriba un comentario
Contribuya con su comentario para sumar valor, corregir o debatir el tema.Privacidad: a) sus datos no se compartirán con nadie; b) su email no será publicado; c) para evitar malos usos, todos los mensajes son moderados.