Definición de Espejo

Entedemos por espejo aquellas superficies que tienen la capacidad de reflejar una imagen de la realidad. Los espejos están siempre compuestos de vidrio, aunque la tonalidad y la nitidez de lo que reflejan puede variar dependiendo del tipo de vidrio. La reflexión en el vidrio se da a partir de leyes de la física que tienen que ver con la incidencia de la luz y la superficie en sí sobre la cual esta se refleja.

Los espejos son tradicionalmente usados para reflejar imágenes de la vida real. En este sentido, los modelos o tipos de espejos más comunes son aquellos que se usan en el día a día, tanto para reflejar el rostro de una persona o para visualizar la imagen personal de un individuo. Estos espejos son los más simples y fáciles de adquirir, además de que pueden ser acompañados por marcos de diverso tipo, color y forma dependiendo del interés del usuario.

Por otro lado, existen otro tipo de espejos que están especialmente tratados para distorsionar la imagen o para generar centros de luz alternativos. Estos espejos pueden ser cóncavos o convexos, no planos, y tener formas muy diferentes uno de otro, además de sumar diversas formas de reflejar una imagen dependiendo del ancho, del alto, de su profundidad o de sus curvaturas.

Los especialistas en decoración siempre consideran a los espejos como uno de los elementos fundamentales con los que contar en una vivienda. Esto tiene que ver con que los mismos suelen agrandar los espacios, haciéndolos más profundos y más infinitos, dando así una sensación de mayor amplitud. Al mismo tiempo, la ubicación de los espejos es fundamental para crear un estilo propio, mientras que la combinación de un espejo con el marco adecuado es central para que el estilo de la vivienda sea claro. Los espejos, finalmente, pueden ser utilizados como elementos de decoración en sí mismos si se coloca una variedad de ellos, con diferentes formas y tamaños, o si se los acompaña con diseños únicos y personalizados.