Definición de Estival

El término estival se utiliza para designar como adjetivo calificativo a la época del año en la cual las temperaturas suben y el clima es más cálido. Esta época estival se conoce comúnmente como verano y, dependiendo del hemisferio, puede suceder desde diciembre a marzo o desde julio a septiembre. El verano es una época que se caracteriza en términos generales por desarrollar las temperaturas más altas del verano, aunque las mismas pueden variar muy claramente entre región y región. Así, estival como adjetivo será utilizado para designar a todo aquello que suceda en este período.

El verano es una de las estaciones del año preferidas de la gente porque se suele asociar a otros fenómenos como una mayor cantidad de días soleados, bajas precipitaciones, temperaturas cálidas, etc. Al mismo tiempo las flores y árboles se encuentran plenamente florecidas y verdes como consecuencia del paso previo de la primavera. En términos generales, el verano es una estación mucho menos dura que el invierno (su opuesto), aunque en los últimos años el cambio climático ha contribuido a generar que las temperaturas sean más y más altas, alcanzando niveles casi intolerables.

Sin embargo, el verano suele asociarse al período vacacional, de interrupción o de cierre del ciclo lectivo, lo cual significa que la mayoría de la población utiliza esta época para viajar o simplemente para descansar debido a que el clima es más agradable y más fácil de enfrentar que lo que sucede en otras épocas del año. Destinos marítimos son la principal elección en esta época debido a la posibilidad de refresco y relajación que aseguran a sus visitantes.

Si bien existen fechas exactas del año en las que esta estación (como todas las demás) comienza y termina, estas no son más que convenciones humanas artificiales que se usan para saber de manera aproximada en qué estación se encuentra la región. Pero para la ciencia, lo que determina cuándo empieza o termina el verano no es otra cosa que los fenómenos astronómicos como el solsticio de verano y el equinoccio de otoño que marcan el comienzo y el fin de la época respectivamente.