Definición de Manta

El animal comúnmente conocido como Manta es aquel que se puede describir como un animal acuático del orden de los Rajiformes (es decir, peces cartilaginosos como también lo es el tiburón). Su nombre científico es Manta birostris y pertenece a la especie de los elasmobranquios, aquellos que están compuestos por cartílagos y por dentículos dérmicos muy ásperos. Uno de los elementos más llamativos y sobresalientes de la manta (también conocida como manta raya) es su cuerpo plano que es al mismo tiempo flexible y amplio como el ala de un sombrero. A través de esta flexibilidad en lo que serían sus aletas es que la manta puede moverse y desplazarse en el mar.

Las mantas son unos de los animales cartilaginosos más grandes que se pueden encontrar en los mares y océanos debido a su extensión, pudiendo alcanzar casi los nueve metros de longitud. Las mantas son animales de agua salada, por lo cual no pueden vivir ni encontrarse en espacios de agua dulce como los ríos o los lagos. Se alimentan normalmente de plancton aunque en algunos casos pueden tener también acceso a pequeños peces. Las mantas rayas son en muchos sentidos similares, no sólo en términos de genética o biología si no también en términos de comportamiento, a los tiburones.

Las mantas son animales extremadamente bellos para observar debido a las formas y movimientos particulares que realizan para desplazarse. Además, siempre suelen ir acompañadas de algunas especies de peces que limpian su superficie, tal como sucede también con los tiburones. Sin embargo, su observación no es recomendada para personas que no tienen experiencia ya que las mantas pueden volverse animales peligrosos y agresivos si se sienten invadidos o amenazados. Así, pueden atacar con su cola y aunque no tengan un aguijón venenoso como sí tienen otros animales similares, lastimar fuertemente con ella.