Definición de Púgil

La palabra púgil refiere boxeador, es decir, a aquel individuo, ya sea masculino o femenino, que se dedica a la práctica del boxeo o box.

El boxeo es un deporte de contacto sumamente popular en el mundo entero que consiste en la lucha de dos contrincantes u oponentes los cuales luchan entre sí empleando solamente sus puños con guantes y pudiéndose golpear al adversario de la cintura hacia arriba, dentro de un cuadrilátero diseñado para tal actividad.

Un partido o enfrentamiento de boxeo se encuentra compuesto de breves secuencias de luchas conocidas como rounds o asaltos.

El boxeo se encuentra regulado por un reglamento que además de las condiciones básicas del juego también regula las categorías de pesos que admite el deporte y la duración de los encuentros entre otros aspectos.

Mientras tanto, en un sentido más amplio del término, la palabra boxeo implica a un amplio abanico de prácticas de contacto en las cuales los adversarios luchan a partir de golpes de puño, tal es el caso del tradicional box, el kick boxing, boxeo tailandés, boxeo japonés, entre otros.

Si bien tradicional e históricamente el boxeo admitió únicamente la práctica de hombres, en los últimos años se ha abierto el panorama y realmente se han convertido en un auténtico entretenimiento las peleas entre damas.

En tanto, el término púgil se encuentra en estrecha relación otros términos como ser: luchador y contendiente, los cuales también se emplean como sinónimos de la palabra púgil.

Y por su lado, el púgil en reposo o púgil de las Termas es el nombre que recibe una escultura de bronce de 1,20 metros de alto que fuera hallado en las Termas de Constantino, en la ciudad de Arlés, al sur de Francia. La misma fue hallada en el año 1885 y se cree que procedía de las ruinas de los baños de Costantino; el realismo increíble del que es dueña la pieza hace pensar que se trata de un boxeador destacado de la época.

La escultura representa a un púgil sentado sobre una roca después de un combate y que aparece girando de modo violento la cabeza. Está vestido con un taparrabos y en las manos lleva unos guantes conformados por unas gruesas tiras de cuero, que rodean sus nudillos y dejan libres los dedos; el cuerpo no presenta signos de violencia, en cambio, su cara, su oreja, y su nariz presentan cicatrices.