Definición de Rezar

Rezar implica manifestar oraciones religiosas. Se trata de un término que ostenta una especial presencia en el contexto de las religiones. “Tras la confesión, el sacerdote, me encomendó como penitencia rezar dos padrenuestros.”

Expresar oraciones en el marco de un contexto religioso para agradecer, para hacer un pedido…

La oración es el medio del que dispone el creyente para comunicarse directamente con Dios, con un santo, o con un difunto, ya sea para realizarles una petición, para expresar algún pensamiento o emoción personal o para expresarles la gratitud por determinada circunstancia que se anhelaba y finalmente ha sido conseguida.

Generalmente, cuando el creyente atraviesa situaciones dolorosas como puede ser la enfermedad de un ser querido, o cuando se encuentra inmerso en un contexto difícil como puede ser la pérdida del empleo con toda la problemática que ello implica de no poder mantenerse él y su familia, es corriente que recurra a su fe, a su Dios, para pedirle que lo ayude a superar ese complejo trance.

Dónde, a quién, y porqué rezamos los creyentes

Este pedido se realiza normalmente en un ámbito religioso y sagrado como es una iglesia, o en la intimidad de la casa, se le pide y habla a Dios y se suelen rezar oraciones, plegarias a él y a otros santos.

Esta práctica alivia y tranquiliza al creyente que por supuesto deposita toda su fe en que recibirá esa ayuda; también es corriente que como compromiso realice alguna promesa ante Dios, y cuando aquello que pidió se concreta, se materializa, por supuesto estará obligado a cumplir con dicho compromiso.

Hay muchos fieles que a pesar de haber conseguido aquello que tanto le pidieron a Dios a través de la oración jamás dejan de cumplir con esa promesa que hicieron ante él, en ese momento de desesperación. Y cada año la renuevan como modo de agradecimiento eterno. Obviamente este comportamiento no hace más que acercar a la persona a Dios y a comprometerse aún más con su fe.

En la Argentina especialmente, y en otras partes del mundo, cuando las personas buscan trabajo le rezan especialmente a un santo: a San Cayetano. Este presbítero italiano, canonizado en el siglo XVII por el Papa Clemente X, es el patrono del pan y del trabajo, y por caso, es que la gente le rinde culto y va a rezar a sus templos para solicitarle que los ayude a conseguir trabajo, a conservarlo, a agradecerle por tenerlo, o a interceder por alguien que no lo tiene y lo necesita.

En Argentina, cada 7 de agosto, día en que se recuerda su muerte, los seguidores de este santo se dirigen a su parroquia y hasta pasan noches en vigilia para agradecer o para pedirle por pan y trabajo.

Dependiendo de la religión, la oración puede asumir la forma de una práctica piadosa, que el individuo lleva a cabo de manera privada, pública, colectiva o individual, en un momento especial o no; la parte de un rito que se recita frente a la comunidad, tal es el caso de la misa cristiana; y una obligación per se, como ser las prescritas 5 veces por el Islam.

Normalmente, la oración es acompañada de una postura física especial como juntar las palmas, mostrar las manos abiertas, abriendo los brazos en cruz, con la cabeza mirando hacia el cielo, bajando la mirada y ocultando el rostro entre las manos, realización de movimientos de vaivén, postración, arrodillándose o inclinándose, entre otras. Por ejemplo, la oración musulmana establece un ritual de posturas codificadas, que incluye la orientación hacia la Meca.

Entre las oraciones que comúnmente rezan los cristianos se cuentan: el padre nuestro, el ave maría, el rosario, la gloria patri, el salve, el magníficat, entre otras.

En la religión musulmana el rezo de oraciones es el segundo de los pilares establecidos por el Islam y se la denomina salat o namaz.

La religión judía también les exige a sus fieles rezar, al despertar, al anochecer, después de cada comida; asimismo, existen bendiciones especiales en el caso de los gozos y prohíbe estrictamente aquellas que piden por el mal de alguien.

La palabra rezar también significa el recitado de la misa o de una oración.

Lo que está escrito

Y también, la palabra rezar es recurrentemente empleada para dar cuenta de aquello contenido en un escrito. “Todos los carteles de la manifestación rezaban: ¡basta de violencia sindical!”.