Definición de Alhambra de Granada

En lo alto de la ciudad de Granada la dinastía nazarí construyó una ciudad-palacio única en el mundo, la Alhambra. Su construcción data de principios del siglo Xlll, cuando los nazaríes veían con inquietud el avance de los cristianos en su intento de reconquista de la península ibérica. En 1492 los Reyes Católicos ocuparon el reino de Granada y terminaron con el último bastión musulmán en la península.

Durante tres siglos la Alhambra cayó en el olvido, pero en el siglo XlX los románticos rescataron el legado de la Alhambra. En la actualidad es una de las visitas turísticas más valoradas en el plano internacional.

El último enclave de la cultura musulmana en España

La ciudadela de la Alhambra fue construida durante más de 150 años. Cuenta con 37 colosales torres, pero no se trata simplemente de una fortaleza militar, pues en ella se encuentran palacios, patios y jardines destinados al ocio. La presencia del agua es uno de sus elementos más característicos. Uno de los secretos de su construcción se encuentra en el material empleado para su edificación, concretamente un conglomerado de arena, arcilla y piedra que le proporciona a la Alhambra su característico color rojizo (los musulmanes la llamaban la ciudad roja).

En los tiempos de la dinastía nazarí en la Alhambra había un tribunal donde el sultán impartía justicia, el denominado palacio de Comares junto al patio de los Arrayanes y un complejo de edificios situado alrededor del patio de los leones, quizás el lugar más emblemático. Junto a estos edificios había dependencias destinadas a las mujeres y otras edificaciones como la Puerta del Vino o los Jardines del Pardal. La conquista cristiana de la Alhambra supuso el inicio de una serie de modificaciones, entre las que destaca el Palacio de Carlos V, el emperador español que estableció en Granada su residencia particular.

La Alhambra más desconocida

Los turistas que en la actualidad la visitan no pueden acceder a ciertos enclaves. En su interior hay subterráneos, pasadizos, túneles secretos, estancias que pudieron albergar grandes tesoros y frías mazmorras en las que los cristianos eran apresados para luego ser utilizados para el intercambio de prisioneros.

Para defender la ciudad de Granada los nazaríes habían construido un recinto militar en el interior de la Alhambra, la Alcazaba. En él vivía la guardia de élite que protegía la vida del sultán. Este lugar permaneció oculto durante siglos, pero tras unas excavaciones realizadas a principios del siglo XX se descubrió esta estructura militar, así como silos que servían para almacenar alimentos.

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