Definición de Apostasía

Cuando una persona renuncia a sus creencias religiosas y toma la decisión de separarse de una iglesia o credo, se produce una apostasía. Este término se emplea normalmente en el contexto religioso y etimológicamente proviene del griego (el prefijo apo significa separarse de y stasis quiere decir rebeldía).

Por lo tanto, el individuo que libremente se desvincula de una creencia religiosa se convierte en un apóstata.

En el contexto del catolicismo

Una parte significativa de los católicos se identifica plenamente con la doctrina de la iglesia. Sin embargo, en algunos casos las convicciones personales chocan con la doctrina oficial y esta circunstancia desemboca en un alejamiento personal.

Por otra parte, los católicos no siempre aprueban ciertas conductas o manifestaciones del clero oficial y esto les provoca un desencanto o una pérdida de fe. En cualquier caso, es posible renunciar al catolicismo, aunque en la práctica se trata de una opción muy poco frecuente.

Tomando de referencia y ejemplo cómo funciona en Argentina

Argentina es un país tradicionalmente católico y la mayoría de la población ha sido bautizada. El acta de bautismo hace que una persona sea oficialmente católica. Sin embargo, si un adulto quiere darse de baja de la iglesia, puede hacerlo siempre y cuando cumpla con una serie de trámites.

El primer requisito consiste en presentar una carta a la diócesis. En su contenido no es necesario presentar ningún tipo de justificación o reflexión sobre la renuncia a la fe católica y basta con indicar que uno quiere modificar los registros de bautismo y darse de baja. En la carta hay que especificar los datos relacionados con el bautismo (principalmente fecha del bautismo y la iglesia donde se realizó). La carta se envía por correo o bien se entrega personalmente.

En principio, la carta tiene que recibir una respuesta favorable en pocos días. Si por cualquier motivo no llega una notificación, el candidato a apóstata debería contactar con la diócesis para consultar la tramitación. Otra posibilidad consiste en denunciar la falta de respuesta a la Dirección Nacional de Protección de Datos Personales.

Si hay una respuesta favorable, el interesado tiene que presentarse en la diócesis para demostrar su verdadera identidad. Tras este trámite, se recibe en el domicilio una certificación oficial en la que se reconoce la apostasía y de esta manera se da por finalizada la tramitación de todo el procedimiento. En la web Apostasía Colectiva se puede consultar cualquier tipo de duda o aclaración.

Evidentemente no se trata de un procedimiento tan simple como cerrar una cuenta de correo electrónico o de Facebook pero tampoco tan compleja como presentar las declaraciones impositivas anuales.

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