Definición de Apóstol

El concepto de apóstol se utiliza de manera extendida en nuestro idioma para referirse a aquel individuo que realiza una tarea evangelizadora, predicadora, promoviendo y difundiendo por el mundo una doctrina, una religión.

Este es el uso más general de la palabra y entonces a cualquier persona que dedica su vida a la prédica de una idea, en cualquier ámbito o campo, se la puede llamar de este modo, aunque, cabe destacarse que el concepto adquirió relevancia en principio en el contexto religioso para denominar así a los seguidores de Jesús y a quienes justamente desempeñaron una tarea evangelizadora a su lado.

Entonces, así precisamente se llamó a aquellos hombres que acompañaron a Jesús en su misión de predicar la fe en dios.
Jesús convocó por aquellos tiempos a doce individuos, que se conocen en la historia de la religión cristiana como los doce apóstoles: Simón, Mateo, Simón Pedro, Judas, Andrés, Bartolomé, Juan, Felipe de Betsaida, Santiago el menor, Tadeo, Santiago el mayor, Tomás.

Todos ellos se unieron a Jesús y lo acompañaron hasta sus últimos días en la tierra. Junto a la básica y esencial misión de difundir la palabra de dios también supieron sorprender con milagros y señales, sanando enfermos, por ejemplo.

El derrotero, la actividad que llevaron a cabo los apóstoles quedó inmortalizado en uno de los libros de la Biblia, llamado justamente como Hechos de los Apóstoles.
Más precisamente se trata del quinto libro del Nuevo Testamento.

Si bien todos los apóstoles cumplieron un rol fundamental, Simón Pedro y Judas Iscariote son sin dudas los que más lograron destacarse a lo largo de la historia, básicamente por hechos concretos que se desarrollaron en esa estrecha relación que mantuvieron con Jesús.

En el caso de Simón Pedro, la importancia que le otorgó Jesús por aquellos años quedó demostrada no solamente en el hecho de ser uno de los apóstoles más mencionados en la sagrada escritura sino también en el hecho que la tradición cristiana lo considera el primer Papa de la historia.

Y como contracara, Judas Iscariote, es tristemente célebre por haber sido quien traicionó a Jesús en la llamada Ultima cena. Judas entregó a Jesús a sus enemigos a cambio de dinero.