Definición de Diligencia

Rapidez, agilidad y eficacia con la cual se lleva a cabo una tarea o actividad

En la actualidad al concepto de diligencia le damos dos usos en nuestra lengua. Por un lado, la usamos cuando queremos dar cuenta de la rapidez, agilidad y eficacia con la cual una persona o entidad llevan a cabo una tarea o actividad encomendada. “El nuevo cadete trabaja con mucha diligencia, fue un hallazgo haberlo contratado”.

Normalmente cuando un individuo o mismo una organización trabajan de manera idónea es normal encontrarse con la cualidad de la diligencia y que por supuesto como consecuencia las tareas o trámites se realicen en conformidad con lo esperado de ellos.

Sin embargo, debemos también decir que esto no siempre se sucede así y también es una realidad el hecho de encontrarnos con personas que han sido contratadas para llevar a cabo una tarea determinada y lo hacen con lentitud o con negligencia, contracaras de la diligencia. Y lo mismo podremos trasladarlo a una organización, hay muchísimas, lamentablemente, que no trabajan con la diligencia del caso y resultan siendo muy ineficaces en su acción.

Trámite de tipo administrativo que tiene la intención de conseguir algún objetivo

Mientras tanto, el otro uso que admite esta palabra es para designar a aquel trámite de tipo administrativo que tiene la intención de conseguir algún objetivo. Por ejemplo presentar determinada documentación que aportará importante información ante el juzgado que corresponda. La presentación de esos documentos consiste en la diligencia.

Justamente en el ámbito judicial es donde mayormente se ejecutan diligencias y por otra parte, en el plano de la administración pública también suelen presentarse con asiduidad.

También el concepto se extiende a la denominación del documento formal que avala y deja una constancia de la realización de dichos trámites ante sede judicial o ante un organismo público. Seguramente, cuando necesitemos demostrar que tal trámite se realizó, nos solicitarán la presentación de ese documento o diligencia.

Coche que era arrastrado por caballos

Y aunque hoy ha quedado relativamente obsoleto su empleo, hay una tercera significación para esta palabra, que se usaba muchísimo cuando la tracción a caballo era el transporte más corriente entre las personas. Precisamente diligencia se llamaba al coche que era arrastrado por caballos y cuya misión era el traslado de pasajeros.