Definición de Ensañamiento
El concepto de ensañamiento está relacionado con acciones que constituyen un delito y más específicamente con el hecho de provocar un mal a otro individuo. Así, alguien se ensaña con otra persona cuando realiza alguna forma de agresión de manera exagerada, desproporcionada y repetida. Como es lógico, el ensañamiento es valorado como un agravante desde el punto de vista penal.
El ensañamiento en caso de asesinato
El hecho de matar a alguien está castigado por la ley. Sin embargo, un juez debe conocer con detalle en qué contexto se ha realizado un asesinato. Si las pruebas que se presentan en un juicio demuestran que el crimen cometido va acompañado de una intención de causar la muerte de alguien de manera lenta y dolorosa y de forma innecesaria este tipo de conductas se consideran un ensañamiento. En este sentido, no es lo mismo matar a alguien de un disparo definitivo que hacerlo con varios disparos porque el asesino quiere expresamente el sufrimiento de su víctima.
El ensañamiento es una conducta agravante porque pone de manifiesto el deseo de hacer sufrir a la víctima.
No siempre hay un acuerdo sobre lo que es propiamente un ensañamiento, ya que que esta conducta tiene que presentar una doble característica: que los medios utilizados sean objetivamente desmedidos (por ejemplo, 40 puñaladas para matar a una persona) y que el asesino tenga la voluntad de causar un sufrimiento superior al estrictamente necesario.
En un contexto no legal, ensañarse con otra persona es ocasionarle un mal de manera continuada, algo que ocurre en algunos casos de acoso (por ejemplo, el acoso escolar o bullying).
Otros agravantes en el Derecho Penal
Que una acción delictiva vaya acompañada de un atenuante o un agravante es fundamental para determinar una sentencia justa. Un atenuante reduce la pena y el agravante la incrementa.
Un agravante clásico que tiene un cierto parecido con el ensañamiento es la consideración de alevosía (hay alevosía en caso de asesinato y no en el de homicidio). Se produce una acción con alevosía cuando el delincuente ha planificado su delito sin asumir ningún riesgo y evitando cualquier posible reacción de la víctima (por ejemplo, matar a alguien con un rifle a una gran distancia). Por este motivo, se dice que el asesino actuó con premeditación y alevosía.
La reincidencia es igualmente otro agravante típico, ya que significa que el delincuente o criminal ya ha realizado con anterioridad una acción delictiva.
Si el crimen que se comete se encuentra en el contexto de la confianza personal entre dos individuos y el criminal se aprovecha de esta circunstancia, se considera que hay un agravante por abuso de confianza.
Trabajo publicado en: Jul., 2015.
Escriba un comentario
Contribuya con su comentario para sumar valor, corregir o debatir el tema.Privacidad: a) sus datos no se compartirán con nadie; b) su email no será publicado; c) para evitar malos usos, todos los mensajes son moderados.