Importancia de cumplir con las Promesas
Licenciada en Psicología
Un estudio realizado por Levine y Messick (1998) encontró que el cumplimiento de las promesas aumenta la confianza entre las personas y promueve una mayor cooperación en los intercambios y las interacciones sociales. En otras palabras, cuando cumplimos nuestras promesas, fortalecemos los lazos de confianza en nuestras relaciones.
Las promesas son más que simples palabras; son compromisos que forman la base de nuestras relaciones interpersonales y moldean la forma en que interactuamos con el mundo que nos rodea. Desde la infancia, aprendemos el valor de cumplir nuestras promesas así como confiar en las de los demás. Pero, ¿qué hace que una promesa sea tan poderosa? ¿Y cómo afecta nuestro comportamiento el cumplimiento o incumplimiento de estas?
En su forma más básica, una promesa es un compromiso verbal o escrito de realizar una acción o cumplir con una obligación en el futuro. Puede ser tan simple como prometer llamar a un amigo para tomar un café o tan significativo como prometer amor eterno en una boda. Las promesas establecen expectativas y generan confianza en nuestras relaciones personales, profesionales y sociales.
La influencia de los incentivos y el impacto del incumplimiento de las promesas
El cumplimiento de las promesas no siempre es una garantía. Los incentivos económicos pueden desempeñar un papel importante en nuestra disposición para cumplir nuestras promesas. Un estudio liderado por Fehr y Schmidt (1999) descubrió que ofrecer incentivos económicos puede aumentar significativamente la probabilidad de que las personas cumplan sus promesas. Esto sugiere que nuestra motivación para llevar adelante una promesa puede estar influenciada por factores económicos y sociales.
Por otro lado, el incumplimiento puede tener consecuencias negativas en nuestra psique y en nuestras relaciones. Cuando no cumplimos nuestras promesas, erosionamos la confianza de los demás en nosotros y podemos dañar irreparablemente nuestras relaciones. Además, el incumplimiento repetido puede llevarnos a cuestionar nuestra propia integridad y autoestima, lo que puede tener un impacto duradero en nuestra salud mental y bienestar emocional. Imagen de Lightfield.
El cerebro y las promesas
Las neurociencias también han arrojado luz sobre cómo el cerebro procesa las promesas y la confianza en las interacciones sociales. Un estudio realizado por Sanfey y colegas (2003) utilizó resonancia magnética funcional (fMRI) para investigar las bases neurales del cumplimiento de promesas y la confianza en los intercambios económicos. Descubrieron que ciertas regiones del cerebro, como la ínsula anterior, están implicadas en la toma de decisiones relacionadas con la confianza y el cumplimiento.
Las promesas y la Responsabilidad Social
En el ámbito de la responsabilidad social, las promesas adquieren un significado amplio y profundo. Las empresas, organizaciones y figuras públicas a menudo hacen promesas relacionadas con la sostenibilidad, la equidad, la diversidad, la responsabilidad ambiental y otras áreas clave. Estas promesas no solo afectan la percepción pública de las entidades involucradas, sino que también tienen un impacto directo en las comunidades y el medio ambiente. Imagen de Infadel.
Por ejemplo, una empresa que promete reducir sus emisiones de carbono está asumiendo una responsabilidad social con el medio ambiente y las generaciones futuras. El cumplimiento de esta promesa no solo mejora la reputación de la empresa, sino que también contribuye al bienestar del planeta y de las personas que lo habitan. Del mismo modo, los líderes políticos que prometen políticas que aborden problemas sociales importantes, como la pobreza o la educación, están haciendo promesas que impactan en la vida de millones de personas.
Las promesas y la Cultura
Las promesas también están intrínsecamente ligadas a la cultura y las normas sociales de una comunidad. La forma en que se hacen, se perciben y se cumplen puede variar significativamente según el contexto cultural. En algunas culturas, las promesas se consideran sagradas y vinculantes, mientras que en otras pueden ser más flexibles o sujetas a interpretación.
Por ejemplo, en algunas culturas orientales, como la japonesa, se da gran importancia al cumplimiento de las promesas y los compromisos personales se consideran sagrados. En contraste, en algunas culturas occidentales, como la estadounidense, las promesas pueden ser más informales y se espera que se adapten a las circunstancias cambiantes.
Además, las promesas pueden estar influenciadas por normas culturales más amplias, como el colectivismo versus el individualismo. En culturas colectivistas, pueden estar más orientadas hacia el bienestar del grupo, mientras que en culturas individualistas, pueden priorizar el cumplimiento de los deseos y necesidades individuales.
Art. actualizado: Feb. 2024; sobre el original de mayo, 2018.
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