Impío - Definición, Concepto y Qué es

La definición de impío va más allá de su significado etimológico. Impío se considera a alguien que no posee la virtud de la piedad, pero su sentido es mucho más amplio, dado que hace referencia a una actitud hostil hacia lo que la piedad representa.

Por lo tanto, un impío no es alguien que, simplemente, no tenga la característica de creer en Dios y en sus enseñanzas, sino quien las desprecia y no respeta su filosofía.

El concepto de impío tiene por tanto toda una serie de connotaciones negativas relativas a la maldad. Al no creer en Dios, el impío no tiene más ley que sus propios instintos y por tanto se deja gobernar por ellos. Como resultado, es astuto, violento, soberbio y posee todo un conjunto de defectos asociados a la condición humana.

La piedad como virtud

La amplia lectura que griegos y romanos llevaban a cabo de la virtud de la piedad es lo que da como resultado que el concepto de impío se utilice como una especie de compendio de todas las maldades del ser humano.

Por un lado, la impiedad es una característica que se asigna a todo aquel que no cree en Dios, por lo que tanto el ateo como el agnóstico son incluidos bajo este calificativo. Es decir, la mera duda acerca de la existencia o no de Dios ya supone ser considerado impío.

Por supuesto, ante un criterio tan extremo, la misma calificación obtienen quienes faltan al respeto a las tradiciones religiosas, a los representantes de la Iglesia, o a los objetos sagrados.

Pero, además, en tiempos de Roma, en los que lo laico y lo religioso estaban íntimamente unido, no respetar a Dios suponía no respetar a los padres, a la autoridad civil o a la patria.

La piedad era la representación de todo lo bueno que el hombre posee en su interior, y como resultado, la impiedad era su opuesto

De hecho, hay un dicho latino que reza “La piedad es el fundamento de todas las virtudes”.

Por lo tanto, aunque la piedad hoy en día está considerada como una especie de sentimiento religioso y a ese ámbito circunscribimos su significado, en la antigüedad se le atribuía un rango mucho más amplio de características.

De ahí que el vocablo latín “Impíus” pueda traducirse con una amplia variedad de significados, todos ellos profundamente negativos, y no sólo en relación al ámbito religioso. Mientras por un lado su significado es “irreverente” o “no religioso”, también se le asignan significados como “inhumano”, “malvado”, “dañino” o “perverso”.

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