Kinestesia (Cinestesia) - Definición, Concepto y Qué es

La kinestesia o cinestesia es la ciencia del movimiento, más específicamente abarca lo relacionado con la percepción del movimiento en relación con el entorno.

En un momento dado podemos ser capaces de percibir en donde estamos ubicados, así como la posición de exacta de cualquier parte del cuerpo en el espacio tanto al estar en reposo como durante el movimiento.

Es así como durante una determinada actividad como una práctica deportiva, el atleta que ejecuta una acción, por ejemplo un salto, es capaz de saber exactamente en donde están sus brazos o piernas y hacia dónde dirigirlos para lograr su objetivo sin necesidad de verlos.

Este conocimiento deriva de la interpretación de la información proveniente de una serie de receptores provenientes de estructuras profundas como los músculos, tendones, articulaciones e incluso las vísceras que lleva a cabo el cerebro. Esta información kinestésica es muy importante para poder lograr tener coordinación y equilibrio en los movimientos.

Kinestesia y propiocepción son dos conceptos distintos

Con frecuencia se suele confundir la kinestesia con la propiocepción. Como se ha descrito la palabra kinestesia hace referencia a la ubicación espacial durante el movimiento, mientras que cuando hablamos de propiocepción nos referimos más bien al conocimiento de la ubicación del cuerpo como todo así como de cada una de sus partes en el espacio.

La propiocepción se obtiene a partir de la información que continuamente envían al cerebro una serie de complejos receptores que son activados por estímulos como la presión, el roce, la temperatura e incluso el grado de contracción de un músculo.

Una forma sencilla de comprender el concepto de propiocepción es con un ejercicio muy rápido, si cerramos los ojos, somos capaces de dirigir nuestra mano hacia cualquier estructura del cuerpo sin equivocarnos, aunque no la estemos viendo, eso ocurre porque nuestro cerebro sabe exactamente donde está ubicada y por ende da instrucciones a nuestra mano para que siga el trayecto que permita alcanzarla.

El miembro fantasma

En ocasiones, las personas que sufren una amputación son capaces de sentir, percibir y ubicar en el espacio el miembro faltante como si aún existiera, incluso pueden manifestar dolor en estas áreas.

Esto es debido a que las lesiones en las terminaciones nerviosas que se ubican en el muñón (extremo del miembro amputado) envían información anómala al cerebro, haciendo que este interprete que la estructura que fue extirpada aún se encuentre presente.

Este trastorno puede ser tratado lográndose su completa desaparición.

Fotos: iStock – cosmin4000 / Johnny Greig