Latifundio - Definición, Concepto y Qué es
Un latifundio es una explotación agrícola de grandes dimensiones caracterizada por el empleo de mano de obra asalariada, la deficiente optimización de recursos, una escasa inversión en medios tecnológicos y la ausencia del propietario de las tierras, que delega en un capataz.
Si bien la extensión de un latifundio puede variar considerablemente, el resto de características suelen permanecer constantes. Por lo general, las condiciones de los trabajadores son muy precarias, hay un importante porcentaje de tierra que no se explota o sus rendimientos están muy lejos de sus máximos de aprovechamiento y el dueño no tiene más contacto con la explotación que el trato con su capataz.
Este conjunto de circunstancias suele dar lugar a la aparición de tensiones sociales cuando las condiciones de la población pasan a ser de un alto grado de necesidad. En esas situaciones es muy común que se exija el reparto de las tierras infrautilizadas para poder producir más alimentos y así poder satisfacer el sustento básico del pueblo.
El Latifundio como modelo de dominación social
La existencia de latifundios no puede analizarse sólo desde la óptica productiva o agrícola, ya que el latifundio genera una serie de relaciones sociales de dependencia que resultan de gran importancia en las comunidades donde existen este tipo de explotaciones.
De esta manera, los propietarios de la tierra son quienes controlan el acceso al trabajo y la producción, con todo el impacto que ello conlleva sobre las poblaciones en las que se encuentran. Ellos son los que determinan el nivel de ingresos de un trabajador y los precios a los que se venden los productos que se extraen de la tierra.
Además, el hecho de que las relaciones entre dueños de la tierra y trabajadores se produzcan en un entorno rural supone la inexistencia de alternativas para la población, que interioriza que su sustento depende de manera exclusiva de la voluntad del terrateniente.
Se produce por tanto un tipo de relación social en la que unos poseen la tierra, las riquezas y el control y otros sólo aportan la fuerza de trabajo. Y aun siendo ésta imprescindible para que la explotación de los latifundios sea rentable, cada individuo por separado resulta fácilmente reemplazable. Esto genera una relación de enorme desigualdad, dependencia, y dominación por parte de una oligarquía sobre la población en general que mantiene relación con la esfera más cercana al latifundio.
Fotos: iStock – DavidGarry / kcconsulting
Trabajo publicado en: Abr., 2016.
Escriba un comentario
Contribuya con su comentario para sumar valor, corregir o debatir el tema.Privacidad: a) sus datos no se compartirán con nadie; b) su email no será publicado; c) para evitar malos usos, todos los mensajes son moderados.