Definición de Margarina

La margarina como alimento surgió a finales del siglo XlX, cuando el emperador Napoleón lll de Francia ofreció una gratificación especial a quien pudiera elaborar un alimento sustitutorio de la mantequilla, un producto tradicionalmente caro.

Fue el químico francés Hippolyte Mège-Mouriés quien fabricó la primera margarina, que en su origen fue llamada oleo margarina. Este nuevo producto estaba destinado al consumo de las clases populares y del ejército. Por este motivo, tanto en Europa como en América el consumo de margarina se ha generalizado en aquellos periodos de recesión económica.

Diferencia con respecto a la mantequilla

Ambos productos son similares en relación con su aspecto y sabor. Mientras la mantequilla proviene de la grasa de la leche (generalmente de vaca), la margarina se extrae de aceites vegetales. Por otra parte, el proceso de elaboración de estos productos es diferente.

En el caso de la mantequilla, en su producción industrial se bate la nata hasta lograr la consistencia típica de la mantequilla. En cambio, la margarina tiene un proceso más complejo, pues primero se obtienen los aceites vegetales (de colza, algodón o palma) que ya cuentan con un proceso artificial previo.

Principales características de la margarina

Su método de fabricación se basa en la hidrogenación y consiste en bombardear el aceite vegetal con moléculas de hidrógeno a una presión y a una temperatura muy elevada para conseguir la textura de la margarina. Este procedimiento no está exento de críticas, pues se considera que hay una alteración de las moléculas del aceite y esto produce las llamadas grasas trans, que son grasas saturadas artificialmente que tienen un elevado grado de toxicidad para las células de nuestro organismo.

La mayoría de margarinas tienen aditivos que permiten imitar el sabor de la mantequilla. Es un alimento con un alto nivel calórico y, de hecho, cada 100 gramos contienen 900 calorías (estos niveles son muy similares a los de la mantequilla). Solo contiene vitaminas si son añadidas artificialmente.

Posibles riesgos para la salud

El consumo excesivo de este producto puede ocasionar algunos problemas de salud, como los niveles altos en colesterol, enfermedades coronarias, la disminución de los niveles de leche materna y la reducción de la reacción a la insulina en los diabéticos. Por este motivo, los expertos en nutrición aconsejan que el consumo de margarina se reduzca al máximo y no sea empleado como un sustituto de la mantequilla.

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