Definición de Nazireato
Nazireato o nazareato es un vocablo de origen hebreo y literalmente quiere decir «consagrado a Dios». Esta denominación hace referencia a los hombres y las mujeres que en la antigua tradición judía se alejaban de la vida mundana para dedicarse temporalmente a la devoción de Dios.
Las primeras referencias sobre esta opción de vida aparecen en el libro de los Números, el cuarto libro del Tanaj
El nazareo era la persona que se consagraba a Dios y no hay que confundir esta palabra con nazareno, que es la persona originaria de Nazaret.
La decisión del nazireato iba acompañada de un compromiso personal, que incluía una serie de preceptos y rituales: la persona consagrada a Dios se dejaba crecer el cabello como símbolo de santidad, tenía prohibido acercarse a una persona fallecida o beber vino, debía acudir al santuario con dos tórtolas y presentar un cordero como ofrenda. Cuando finalizaba el periodo de consagración, el nazareo llevaba nuevas ofrendas al santuario, se rasuraba la cabeza y el cabello era quemado en señal de purificación. El nazireato era totalmente voluntario.
Este ritual debe interpretarse simbólicamente. Así, a través del mismo el creyente se apartaba temporalmente de la vida corriente y se entregaba a la veneración del Creador. Hay que indicar que en la antigua tradición hebrea algunos nazireos optaban por una consagración vitalicia. Algunos personajes bíblicos, entre ellos Jeremías o Sansón, llevaron este tipo de vida de manera temporal.
El nazireato también aparece en el Nuevo Testamento y Juan El Bautista ejemplifica este tipo de vida en la tradición cristiana
Siendo muy niño Juan El Bautista sintió que había sido llamado por Dios. Para vivir consagrado plenamente al Creador se fue a vivir al desierto, donde podía permanecer en silencio y practicar un severo ayuno. El hecho de apartarse (el verbo hebreo nazir significa precisamente apartarse) tenía un significado profundo, pues implicaba un mayor acercamiento a Dios.
Vivió en soledad durante casi veinte años y finalmente consideró que era el momento adecuado para dar a conocer la llegada del Mesías
Comenzó su predicación cerca de las orillas del río Jordán, donde la gente le escuchaba atentamente. Quienes creían en sus palabras y se arrepentían de sus pecados se hacían bautizar como señal de purificación (por este motivo ha pasado a la historia como Juan El Bautista).
Cuando en una ocasión apareció Jesús de Nazaret en las proximidades del Jordán, Jesús quiso conocer a quien le había preparado el camino. El hijo de Dios también quiso ser bautizado, pues de esta manera se presentaba ante los hombres como un pecador más.
Fotos Fotolia: Del / Jiawangkun
Trabajo publicado en: Feb., 2019.
Escriba un comentario
Contribuya con su comentario para sumar valor, corregir o debatir el tema.Privacidad: a) sus datos no se compartirán con nadie; b) su email no será publicado; c) para evitar malos usos, todos los mensajes son moderados.