Definición de Reforma política

Una reforma, en cualquier contexto, ámbito, en el cual se la lleve a cabo, siempre, implicará la introducción de algún cambio, transformación, con la misión de mejorar, corregir algún aspecto, o de marcar la innovación en cierto punto.
Entonces, cuando la reforma se efectúa sobre un escenario político lo que se buscará a través de la misma es introducir en él una modificación que precisamente desemboque en un cambio contundente en el orden establecido.

En tanto, con ella, lo que habitualmente se busca es la perfección de algunas cuestiones que sí o sí demandan un cambio en materia administrativa o estatal, o en su defecto la mejoría en las mencionadas materias.

Es importante destacar en este punto que la reforma no quiere de ninguna manera imponer un nuevo sistema político para reemplazar el vigente, básicamente, porque su razón de ser no es erradicar por completo un orden establecido por otro, sino únicamente modificar o incluir alguna mejora en el sistema en acción, en el que se haya en funcionamiento, para hacerlo más actual, por ejemplo, pero nunca querrá ocuparlo con otro.

La reforma justamente es respetuosa de las autoridades, de las instituciones y de la normativa que existe y por caso cualquier cambio que quiera imponerse tendrá en consideración a las mismas y siempre se respetará que nada resienta su acción, su continuidad o autoridad.

Esto es importante que lo destaquemos porque habitualmente se cree que la reforma en sentido político implica modificar de plano un orden por otro y esto no es así, o por lo menos no es la motivación de una reforma.
Porque por el contrario, cuando una reforma acecha directamente al orden ya establecido ahí sí se estará produciendo una ruptura total y estaremos ante un proceso político más bien revolucionario y no reformador.

Por otro lado, las reformas siempre proponen consecuencias, efectos, que se podrán apreciar de manera directa en la vida social y política de la sociedad en la que se la efectúa.

En la vida democrática de aquellos países que justamente optan por el sistema democrático como forma de gobierno es corriente que se generen reformas políticas que tendrán como propósitos, por ejemplo instalar modificaciones que agilicen el sistema general de comicios, por citar una de las cuestiones que suelen sufrir reformas.