Significado de gobierno Definición, importancia, y formas de gobierno

Definición formal
El gobierno es aquel aparato de instituciones y órganos que, en representación del Estado, ejercen un orden sobre los ciudadanos y los recursos que estuviesen en la circunscripción territorial correspondiente a sus facultades.Como voluntad del Estado, podemos generalizar los objetivos del mismo haciendo referencia a que este se sujeta a lo que persigue el Poder Ejecutivo como representante principal y que normalmente eso que busca dicho Poder está establecido de manera taxativa y explícita en el Texto Fundamental, es decir, la Constitución; por ejemplo, garantizar un Estado de Derecho para la Nación que se representa es un objetivo al que debería aspirar todo Gobierno de turno en el ejercicio de sus funciones.
Por su parte, es posible expresar una especie de paralelismo en múltiples escenarios de la vida cotidiana adjetivando a una autoridad ejercida por una persona o ente, ante los respectivos subordinados.
Diferencia entre Gobierno, Estado y Administración Pública
Debido a que son términos utilizados prácticamente como sinónimos y que tienden a ser confusos al momento de su utilización, es conveniente aclarar diferencias sustanciales y los nexos de encuentro. Así, tenemos primeramente que el Estado es una concepción que se inclina hacia el punto de vista de la política, siendo la escala de mayor envergadura que posee la sociedad en el punto de vista jurídico.
El gobierno como habíamos señalado anteriormente vendría siendo el brazo extensivo del Estado, tornándose de una u otra forma como aquel que distribuye los poderes del Estado mismo para el ejercicio de sus funciones.
La Administración, por su parte, se ve influenciada por el Estado como matriz de todo lo que surge en la Nación y por el Gobierno ya que por medio de los Poderes que este designa surgen las leyes a la cual esta debe someterse, es decir, que Gobierno depende del Estado y la Administración Pública del Gobierno.
Importancia de separar y limitar los poderes
Los Estados tienen normalmente tres Poderes fundamentales, que son los encargados de cumplir con todas las funciones que debe asumir el Gobierno como tal, y evitar abusos, estableciendo: El Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo y el Poder Judicial.
El Poder Ejecutivo es aquel representado por el Jefe de Estado de la Nación, siendo el responsable principal de dirigir la acción de Gobierno. Dependiendo del país, pueden ser el Presidente de la República, el Primer Ministro (por ejemplo en Reino Unido) o Canciller (tal es el caso de Alemania).
El ejecutivo tiene la función de, por medio de las Leyes creadas por el Parlamento (representado por el Poder Legislativo), planificar métodos beneficiosos para el Estado y todo lo que esté dentro de él. Además, el Ejecutivo debe coadyuvarse conjuntamente con los Poderes restantes para el desarrollo correcto de la Nación, ya que al este planificar y aprobar las leyes que dictamina el Legislativo, debe proporcionar las facultades suficientes para el Poder Judicial, para que este pueda actuar con justicia para garantizar el Estado de Derecho.
Por su parte, en los modelos monárquicos se esgrime la figura del Rey, teniendo la palabra definitiva, en ausencia de una división de poderes con autonomía propia. A pesar de la presencia de otros actores y órganos involucrados, todos deben responder al rey. De manera similar, ocurre en los procesos de dictadura, a partir de la destitución de un gobierno democrático, posicionando a una personalidad (y su cúpula) al mando por la fuerza. La ausencia o la eliminación de los otros poderes permite que se desarrolle una lideranza sin ningún tipo de restricción ni control.
Formas de gobierno
Durante el transcurso de la historia, han surgido diversas maneras por medio de las cuales las personas ejercen el Gobierno, señalemos algunas de las más populares y predominantes de todos los tiempos:
o Monarquía. Esta es la forma por medio de la cual una familia gobierna de manera ininterrumpida a través del tiempo debido a una herencia familiar que normalmente acarrea muchísimos años de historia, traspasando de generación en generación la responsabilidad de ser el Jefe de Estado del país de turno.
o Dictadura. Consiste en el gobierno por autoproclamación de una persona que llega al poder generalmente por medio de la violencia y la opresión.
o Democracia. Es cuando un grupo de personas habilitadas para decidir de acuerdo a las leyes correspondientes a su Nación, escogen en su mayoría a quien ellos quieren que los represente como Jefe de Estado.
¿Qué es un gobierno de facto y cómo incide en la población?
Un Gobierno de Facto es aquel que a pesar de que ejercen funciones como cualquier gobierno legítimamente aprobado por las autoridades competentes, no tiene el reconocimiento o base legal para fungir como tal debido a la manera ilegítima por medio de las cual se atribuyó el ejercicio de esas funciones de gobierno.
Estos suponen un peligro inminente para la situación político-social del país al cual hagan aparición, ya que normalmente utilizan medios de opresión para que los ciudadanos hagan fiel cumplimiento de los decretos y órdenes que sus representantes ejecutan. Además, dan la idea de que cualquiera puede llegar al poder por cualquier medio, instalando pensamientos de rebelión entre los ciudadanos, que tarde o temprano conducen a la anarquía, al desorden e incluso a Guerras civiles que traen consecuencias trágicas en materia económica y sobretodo humana.
Referencias en la antigüedad
A través del tiempo han existido maneras de gobernar distintas, habiéndose acogido estas a la realidad del país o reino en el cual estuvieran cumpliendo funciones y a los ideales que tuviera quien estaba a cargo y representación del Estado. Así tenemos que en el antiguo Egipto existía la figura del “Faraón” que representaba un sistema monárquico donde él estaba a cargo de todo lo relacionado al Imperio.
En Grecia existían un conjunto de personas que se reunían en lo que hoy podríamos definir como un senado y que tenían una función comunicativa para con el pueblo de lo que el Rey había decidido.
En Roma también se utilizaba la figura monárquica como forma de gobierno y aunque tenía algunos matices distintos seguía funcionando como tal.
Ya en la Edad Media es que entra en escena de manera vehemente otra forma de gobierno que es la denominada República, la cual cohabitó por todo el mundo junto a la monarquía como la otra manera por medio de la cual los representantes de los Estados ejercían su autoridad.
