Definición de Streusel

Streusel es una palabra alemana, que se podría traducir como esparcido, derramado o espolvoreado. Etimológicamente la palabra streusel viene del verbo streusen, que quiere decir esparcir.

Se utiliza este término en el mundo de la repostería, ya que son diversos los postres en los que hay una parte cubierta con algún ingrediente, normalmente el azúcar o la mantequilla. Así, ciertos pasteles o magdalenas incorporan esta técnica. La finalidad del streusel es proporcionar un sabor singular y al mismo tiempo una textura crujiente.

Cómo hacer streusel

Los ingredientes básicos son los siguientes: mantequilla, azúcar y harina (normalmente dos partes iguales de mantequilla y de azúcar y el doble de harina). Para hacer streusel primero hay que derritir la mantequilla y luego se mezcla suavemente con el resto de ingredientes. Para ello se pueden utilizar las yemas de los dedos y así se forman unas migas semejantes a la arena.

Para complementar su sabor es posible incorporar otros ingredientes, como por ejemplo canela, vainilla, frutos secos o trozos de frutas. La mezcla final se coloca como cobertura sobre la masa de un pastel o un bizcocho que debe introducirse durante unos 40 minutos en el horno para que se caliente.

El objetivo de esta proceso es crear una textura que contraste con el contenido más jugoso del pastel, el bizcocho o la magdalena.

El streusel en la repostería alemana

En la repostería alemana los pasteles con esta cobertura son conocidos con el nombre de streuselkuchen. De esta manera, esta cubierta crujiente se presenta en la tarta de manzana, en bizcochos y en todo tipo de postres. En Alemania, los streuselkuchen son muy populares en las cafeterías selectas y también son consumidos en el hogar en algunas ocasiones especiales.

Otros postres típicos con proyección internacional

El streusel como cobertura y los pasteles streuselkuchen nos recuerdan que la repostería local en algunos casos alcanza la dimensión internacional. La ensaimada es un postre medieval típico de Mallorca y actualmente un número elevado de turistas que visitan la isla regresan a sus hogares con una ensaimada bajo el brazo. Algo similar ocurre con el baklava griego, la tarta de queso japonesa, la torta de Portugal, el pastel de miel israelita o las quesadillas salvadoreñas.

La internacionalización de la repostería tiene una relación directa con el turismo, ya que una de las opciones de cualquier turista es conocer los sabores del lugar que visita.

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