Definición de Usucapión

En el ámbito de los bienes inmobiliarios, hay diferentes situaciones que tienen que ver con a quién pertenece de hecho o de derecho una propiedad, por lo cual existen distintas explicaciones o justificaciones para cada caso. Un caso especial es aquel que se denomina como usucapión y que tiene como objetivo final cerrar una situación de duda o de incertidumbre sobre la posesión de un bien inmueble como una casa, una fábrica, un departamento o un edificio entero.

La usucapión puede ser definida como el derecho que se le otorga a un individuo o a un colectivo de individuos a poseer el bien inmueble que habitan que, a pesar de no ser de su propiedad y de existir un dueño real, han habitado por largo tiempo de hecho. Así, la usucapión busca resolver una situación de conflicto que no es fácil de solucionar: cuando una casa o propiedad es habitada por alguien que no es su propietario legal, ¿a quién pertenece si la vivienda o construcción ha sido abandonada, descuidada o no reclamada por el dueño por mucho tiempo?

La figura de la usucapión es muy importante por varias razones. Por un lado, permite a los habitantes o utilizadores de un espacio inmueble a poseer el mismo debido a su presencia de hecho y a través del tiempo en el lugar. Por otro lado, facilita la resolución de cuestiones pendientes al respecto en casos específicos como pueden ser por ejemplo el deceso del dueño original, la falta de reclamo sobre el inmueble, el abandono del mismo, etc. Para la justicia, la figura de la usucapión tiene como objetivo otorgar derechos a aquellas personas o grupos de personas que han usado para su beneficio el inmueble mientras el mismo no ha sido reclamado por mucho tiempo por nadie en particular.

Un dato interesante en este sentido es que la usucapión privilegia o prioriza la acción efectiva de quienes ocupan el inmueble (quienes se considera que lo hacen por necesidad, urgencia o beneficio como cuando una fábrica es abandonada y retomada o rehabilitada por sus trabajadores) frente a la inercia o a la inactividad de quien se considera como sujeto pasivo, es decir, aquel dueño de derecho que no la ha reclamado. La usucapión no da lugar a ocupaciones clandestinas o de mala fe sobre la propiedad, pero en el caso de comprobarse la buena fe y la necesidad, la propiedad pasa entonces a manos de quien la haya ocupado efectivamente a lo largo de mucho tiempo aún sin poseer el título de posesión.