Definición de Ama de Casa

Un ama de casa es una mujer que se dedica a las tareas propias del hogar. En cuanto a las actividades que se llevan a término, el listado sería casi interminable: lavar la ropa y plancharla, cocinar, limpiar la casa, realizar la compra periódicamente y, si la familia tiene hijos, también hay que incluir todas las tareas relacionadas con ellos (acompañarles al colegio o ayudarles en sus trabajos escolares).

Un trabajo muy poco reconocido socialmente

La decisión de ocuparse de las tareas del hogar depende de muchos factores, tales como la situación económica familiar, la formación de la mujer o la atención de los hijos.

Si bien no hay un perfil único de ama de casa, en la mayoría de casos está elección está relacionada con el cuidado y la atención de los hijos. En este sentido, muchas mujeres deciden abandonar temporalmente su actividad laboral para centrarse en sus hijos. Esta elección tiene ventajas e inconvenientes, ya que los hijos están mejor atendidos pero, por otra parte, el regreso a la actividad profesional puede ser difícil para la mujer.

En líneas generales, las amas de casa no están reconocidas socialmente. Hay que tener en cuenta que es una actividad no remunerada y que no requiere de una formación específica. Esto hace que se produzca una curiosa paradoja: las amas de casa trabajan intensamente pero no cobran por ello.

La actividad de ama de casa tiene ventajas e inconvenientes

Si una mujer decide libremente dedicarse a las tareas del hogar porque es su vocación, se trata de una elección legítima. De hecho, su actividad diaria tiene una serie de ventajas objetivas: no tiene jefes ni conflictos laborales, es posible organizar el propio horario y no necesita desplazarse a ningún sitio. Sin embargo, no hay que olvidar que también hay toda una serie de aspectos negativos:

1) la jornada diaria puede resultar monótona y poco estimulante,

2) económicamente no hay una recompensa por el trabajo realizado y

3) socialmente se produce un cierto aislamiento.

El concepto de ama de casa ha ido cambiando a lo largo de la historia

Ya en las antiguas civilizaciones la mujer tenía un papel secundario con respecto al hombre. Su actividad principal se centraba en el hogar. Este rol femenino no ha desaparecido por completo, pero en la mayoría de países la mujer se ha incorporado paulatinamente al mundo laboral y su situación se ha equiparado a la del hombre.

Si tomamos como referencia el caso de España, hasta la década de 1960 la inmensa mayoría de mujeres eran amas de casa y su actividad recibía una curiosa denominación, sus labores.

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