Definición de Categórico

Se utiliza esta palabra en el lenguaje coloquial para indicar que algo es rotundo en sentido positivo o negativo («me dijo que no de manera categórica» o «estoy categóricamente a favor de la propuesta»). Por otra parte, este término tiene una dimensión filosófica.

Lo categórico en el silogismo

Cuando afirmamos o negamos algo con respecto a una clase, empleamos proposiciones categóricas. Así, si digo «todos los deportistas son jóvenes «estoy afirmando algo según una categoría universal y si digo «algunos poetas son románticos» se trata de una afirmación con una categoría particular.

Por otra parte, el l silogismo categórico es un tipo de afirmación construida a partir de dos premisas y de una conclusión. Por ejemplo, el siguiente argumento es una muestra de un silogismo categórico: Todos los perros son animales, algunos perros son negros y, por lo tanto, algunos animales son perros.

Las proposiciones categóricas dependen de una serie de reglas (una de ellas sería que si las dos premisas del silogismo son afirmativas, no es posible que la conclusión sea negativa).

El imperativo categórico kantiano

En el ámbito de las obligaciones morales empleamos juicios de tipo hipotético o condicionado. Así, si digo «lávate los dientes si no quieres ir al dentista«, afirmo algo que está condicionado (si quieres A debes hacer B).

Sin embargo, hay otro tipo de juicios que no son hipotéticos sino categóricos. Estos juicios deben surgir de nuestra propia convicción moral, es decir, de una ley que nosotros mismos nos impongamos como norma de conducta. En consecuencia, el imperativo categórico no dice lo que se tiene que hacer sino cómo debe hacerse.

En otras palabras, la ley moral que empleemos individualmente es aceptable siempre y cuando todo el mundo la pueda aceptar como válida

El ejemplo clásico de imperativo categórico vendría a decir lo siguiente: actúa según una regla moral que sea válida para todos. Si mi regla moral es «yo hago lo que me da la gana», no es deseable que dicha regla sirva para todos.

En cambio, si digo «me comporto con la intención de hacer el bien a los demás» dicha afirmación es un imperativo categórico, pues es una regla moral que uno mismo se impone y, a la vez, se convierte en un principio universal.

El imperativo categórico formulado por Kant pretende ser un principio moral de carácter general. Según este planteamiento, las cuestiones morales no deben basarse en propuestas del tipo «no robes porque es pecado» o «no digas mentiras porque no está bien», sino que los principios morales deben partir de un criterio racional: actuar según reglas que puedan ser aceptadas por cualquier ser humano.

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