Definición de Ciberpunk
En el siglo XlX la irrupción de las máquinas fue recibida mayoritariamente con optimismo, ya que parecía que la producción industrial y los avances técnicos nos llevarían a la plenitud como sociedad. Literatos como Oscar Wilde o filósofos como Karl Marx entendieron que las máquinas podían ser los perfectos aliados para la emancipación de la humanidad. Cien años después apareció una corriente literaria que presentaba una visión distópica frente a los utópicos del pasado, el ciberpunk. Supone la síntesis de dos postulados: cibernética y el vocablo punk como sinónimo de rebeldía.
Este movimiento literario, y su posterior versión cinematográfica, se enmarca dentro del género de la ciencia ficción y en sus historias la cibernética aparece como una amenaza inquietante y no como una salvación.
El universo ciberpunk dio sus primeros pasos en los 80 con las novelas «Neuromante» y «Conde Cero» de William Gibson. El subgénero continuó con títulos como «Carbono alterado» de Richard Morgan, «Marea estelar» de David Brin y películas como las míticas «Blade Runner», «Matrix» o «Terminator».
Con el tiempo el manga y el anime japonés y el sector del comic convencional apostaron por un neo ciberpunk. Lo mismo ha sucedido en el sector de los videojuegos.
¿Qué podemos encontrar en las historias del ciberpunk?
El marco de referencia de la ciencia ficción no es un futuro lejano y distante sino un futuro muy próximo al presente, algo así como lo que nos espera a la vuelta de la esquina.
Aparecen referencias anti-utópicas y el modelo capitalista de la sociedad presenta una versión muy poco amigable: tribus urbanas que se oponen al sistema, una atmósfera pseudoapocalíptica, personajes dominados por la inteligencia artificial o la ingeniería genética y unas multinacionales que sustituyen al poder político.
El paisaje urbano es cibernético y, al mismo tiempo, decadente; pues encontramos grafitis, luces de neón en ciudades empobrecidas y tecnologías que arrinconan a los humanos.
El ciberpunk combina varias tendencias narrativas. En este sentido, bebe de los clásicos de la ciencia ficción del siglo XX (novelas como «1984» de Orwell o «Un mundo felíz» de Huxley), tiene algo de novela negra de detectives y algunas semejanzas con el movimiento Steampunk.
Dimensión filosófica
Si bien se cuentan historias de ciencia ficción, hay mucho más que una descripción ingeniosa del futuro. El ciberpunk aborda algunos interrogantes de interés filosófico: ¿seremos los humanos dominados por la inteligencia artificial?, ¿somos capaces de dominar la tecnología?, ¿nuestro ser individual será el mismo cuando la cibernética y la ingeniería genética nos convierta en alguien distinto?, ¿si las experiencias individuales se recopilan en un chip continuaremos siendo nosotros?
Fotos Fotolia: Nejron / Agor2012
Trabajo publicado en: Oct., 2018.
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