Definición de Dolor

Sensación de sufrimiento física o psíquica

Se llama dolor a aquella sensación física, o en su defecto espiritual, que implica un sufrimiento. El dolor de tipo físico es plausible de ser experimentado por los seres vivos que poseen un sistema nervioso central y el mismo podrá variar en lo que respecta a su intensidad, localización y duración en el tiempo.

El dolor es una respuesta que el ser vivo da ante una agresión o el desajuste que sufre su organismo en algún nivel. Si nos referimos estrictamente a los seres humanos podremos hablar, como ya señalamos de dolor físico o de dolor emocional, son los dos dolores típicos que solemos padecer las personas.

El dolor es captado por las terminaciones nerviosas que lo convierten en impulsos eléctricos que son enviados al cerebro a través de los neurotransmisores y allí se los registra de manera consciente.

Un dolor puede ser crónico, es decir, jamás se irá, acompañará al ser vivo durante toda su vida, o bien agudo, más o menos intenso, pero con una limitada duración en el tiempo.

Diversas percepciones del dolor de acuerdo a la persona

No todas las personas perciben al dolor de la misma forma, hay algunos que presentan una mayor tolerancia al dolor que otros, siendo más adaptables y resistentes al mismo. El umbral del dolor, tal como se denomina al punto a partir del cual se percibe el dolor, es lo que generalmente se evalúa para determinar si alguien es resistente o no al mismo. Por ejemplo, cuando alguien resiste un dolor más allá de lo normal se dice que posee un alto umbral del dolor y si por el contrario, una persona se manifiesta inmediatamente dolida por una molestia se dirá que la misma posee un bajísimo umbral del dolor. La sensación de dolor dependerá en gran medida del estado emocional que presente el paciente y también de su estado físico en general.

Hay mucho de subjetivo entonces en el padecimiento del dolor y por ello mismo resulta ciertamente difícil, por no decir imposible, conocer el nivel de dolor, de malestar que puede estar padeciendo otra persona. Cada cual es capaz de saber el nivel de dolor que sufre en carne propia pero no puede jamás saber el grado de otro individuo, es muy personal y particular esta cuestión. Alguien podrá decir me duele mucho la cabeza y nosotros tomar idea que ese dolor es intenso por cómo lo manifiesta pero no podemos tener una real dimensión del mismo.

Síntoma y alerta de una enfermedad

Casi siempre el dolor es el síntoma de alguna dolencia que deberá ser diagnosticada y actúa como una alarma, un alerta, que nos avisa que algo no está funcionando correctamente como debería.
Obviamente que casi nadie le ve el lado positivo al dolor, porque sin dudas sentir dolor no es una sensación para nada agradable, ahora bien, sí podemos encontrar algo de positividad en el mismo al alertarnos que algo no está funcionando, nos da el pie para investigar qué sucede detrás de ese dolor y una vez obtenida la causa poder tratarla para que desaparezca.

Analgésicos y anestesia, medios para mitigar el dolor

Por ejemplo, el dolor de una muela es un claro indicador que en la misma puede haber una infección, una caries; por su lado, el dolor de cabeza puede ser indicador de un problema de tensión o por falta de ingesta de alimentos durante un lapso prolongado, por qué lo determinará un médico.
En tanto, los analgésicos suelen ser los medicamentos que más se recomiendan para combatir estos tipos de dolores.
Pero debemos decir que la investigación médica ha desarrollado una infinidad de alternativas para mitigar el dolor, la anestesia es una de esas tantas junto con los anestésicos.
La anestesia fue un avance increíble en la búsqueda de reducción del dolor, y vaya que lo ha conseguido. Sin ella, hoy, sería imposible operar a una persona sin que sintiera dolor o sacarle una muela a alguien sin que ese proceso resulte traumático.
Asimismo, un parto, que para algunas mujeres resulta ser muy doloroso cuenta con una anestesia especial que permite hacerlo llevadero.

Estado de pesar que sufre una persona ante un acontecimiento triste

El otro uso recurrente del término es para designar el estado de pesar, tristeza, pena o sufrimiento que siente una persona luego de atravesar alguna circunstancia trágica de perdida de algún ser querido , por ejemplo. Me duele el alma es una de las expresiones más utilizadas para designar y dar una idea metafórica del estado de angustia que provoca el hecho de padecer la desaparición de un ser querido. La charla con algún amigo, la compañía de la familia y el llanto suelen ser las mejores maneras para mitigar y recuperarse del dolor emocional.

Masoquismo, práctica sexual que siente placer al recibir dolor

Y por otra parte, cuando en un plano sexual una persona únicamente disfruta y siente placer si se le inflige dolor, tal situación se denomina masoquismo y está considerada como una patología.