Definición de Educación STEM

Serena Cuoghi
Título de Profesora de Biología

Entre las reformas educativas de la nueva era surge una modalidad enfocada hacia la priorización de la enseñanza de la Ciencia, la Tecnología, la Ingeniería y las Matemáticas, denominada por las siglas en inglés de estas cuatro áreas como STEM, bajo la premisa de formar a las nuevas generaciones dentro del contexto tecnocrático que está revolucionando a la humanidad y enfocadas hacia el máximo aprovechamiento de las capacidades intelectuales, así como de los recursos, para la solución de los problemas ambientales ocasionados a lo largo de los siglos anteriores y demás retos que supone la vida cada vez más tecnológicamente dependiente que estamos llevando. En este sentido, la educación STEM está orientada en:

1) promover el desarrollo de las habilidades mentales fundamentales del pensamiento crítico, la resolución de problemas y la creatividad, a través de la estimulación generada por la resolución práctica de problemas y el desarrollo de propuestas formuladas mediante la ejecución de proyectos;

2) la capacitación del trabajo en equipo como valor esencial en la interacción entre los estudiantes, aplicable para todos los aspectos de la vida, permitiendo incrementar el nivel de empatía y otros valores como la generosidad, el altruismo y la solidaridad;

3) fomentar la innovación y el progreso tecnológico al ir capacitando a los estudiantes desde los niveles iniciales de la educación básica, en el diseño y desarrollo de productos tecnológicos cuya aplicación permita la transformación social y económica desde su propia comunidad hacia el resto de la humanidad;

4) preparar a los estudiantes dentro de áreas profesionales de alta demanda y con desarrollo prolongado en el futuro, que puedan brindarles estabilidad laboral mediante oportunidades de empleo sólidas con remuneraciones competitivas y que, además, les permitan la posibilidad de desempeñarse también de manera autónoma a través del desarrollo de proyectos independientes y emprendimientos propios;

5) generar un estado de conciencia superior sobre la necesidad de generar contribuciones viables que orienten al desarrollo sustentable de las generaciones presentes y futuras, sobre todos sus procederes;

6) el desarrollo de aportes para la resolución de los problemas globales como el cambio climático y la salud pública, a partir de la contribución de las comunidades.

Objetivos del siglo XXI

Entre las mayores ventajas para el propio desarrollo tecnológico que la educación STEM puede ofrecer, se encuentra la intención de reducir la brecha digital, a través de la capacitación masiva en el conocimiento científico y tecnológico, por medio de la implementación de recursos y TICs que incentiven el aprovechamiento de estas tecnologías para la modernización de todos los sectores de la sociedad, sirviendo como estrategia de intervención social que contribuye a la reducción de la pobreza y segregación de las comunidades que por diversas razones se encuentre en desventaja formativa y ajenas al desarrollo tecnológico disfrutado por otros sectores en aras de ir alcanzando la igualdad de derechos y oportunidades para todas las sociedades.

En el marco de los resultados atribuibles a esta trasformación educativa se pueden apreciar el crecimiento del interés por parte de los estudiantes y maestros en la participación del desarrollo de proyectos que sumen respuestas a las necesidades inmediatas de su entorno, mientras que la creciente dinámica de generación de encuentros y demostraciones de competencias nacionales, y más aún las internacionales, está impulsando a los Estados hacia el incremento de la destinación de recursos intelectuales, materiales y económicos para la adopción de la educación STEM que le permita demostrar las habilidades y propuestas que sus propios ciudadanos tienen para ofrecer, dentro de una pujante dinámica en la que ya casi todos los países desean poner en manifiesto la competitividad que posee para mantenerse integrados a la nueva era tecnológica.

Funcionalidad para hacerse significativo

La enseñanza de los contenidos de una manera pragmática que permita demostrar su utilidad, se convierte en una experiencia reveladora que permite a los estudiantes no sólo el descubrimiento de sus habilidades naturales y talentos, sino que también les ayuda en el desarrollo de un sentido de pertenencia con respecto a las responsabilidades que todos hemos de asumir para el logro de la solución de los múltiples problemas que enfrentamos y a los cuales hemos sometido incluso el bienestar y equilibrio de las demás especies y el planeta.

Este empoderamiento recursivo guía también a las nuevas generaciones en el sendero de asumir la educación como el factor imperante para la consecución de la verdadera libertad personal, así como una fuente de estrategias ilimitadas que permiten el desarrollo de los aprendizajes significativos de los que se hablasen en el paradigma constructivista de la educación, pero enfocados a la obtención de resultados efectivos con los cuales ayudar a la mejora de la humanidad.

Un camino para la recuperación de la formación científica

Pese a que la propuesta del modelo de educación STEM surgió en la última década del siglo pasado como un propulsor de la adecuación escolar en Estados Unidos, no ha sido sino por medio del vertiginoso crecimiento tecnológico de los últimos 20 años que su consideración ha ido tomando fuerza y expandiéndose hacia todas las demás naciones, asumiéndose la idea de que esta propuesta educativa posibilita aún más la interconexión entre las realidades sociales y profesionales, así como el desarrollo transdisciplinario de los conocimientos, abriendo las puertas de la investigación científica y tecnológica a todas las personas y en todos los niveles, a modo de permitirles aprovechar sus propias habilidades y gustos para la generación de aportes trascendentales, con los cuales también revalorizar el talento humano.

Avanzar en este camino ha sido posible gracias a la suma de pequeños pasos, como la publicación en 2003 del Informe PISA de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), con el cual se dejó en evidencia la importancia de educar en matemáticas y ciencias para impulsar el crecimiento de la economía de las naciones, o el informe del 2005 de la Rising Above the Gathering Storm de Estados Unidos, que alerta sobre la necesidad de mejorar la educación científica para mantener la competitividad del país, hecho que propició el incremento de las iniciativas educativas promulgadas por la ley No Child Left Behind de 2001, bajo la cual se amparan, entre otros recursos, los crecientes programas y organizaciones que promueven en la nación americana la implementación de la educación STEM, como por ejemplo hace la STEM Learning Ecosystem.

La evolución dinámica y constante de las ciencias, especialmente en el entrono tecnológico, ha orientado hacia la formulación de la educación STEM adecuada a su integración en todos los niveles educativos, partiendo desde la educación inicial y prolongándose a lo largo de todos los momentos académicos formales, a distancia y autodidactas, lo que indica que asumir los conocimientos científico-técnicos bajo esta modalidad surte grandes y positivos efectos, especialmente en pro del mayor objetivo que persigue al pretender fomentar un mayor nivel de comprensión y aprovechamiento de las habilidades humanas para el desarrollo de las soluciones que permitirán prolongar nuestra supervivencia futura.

Por: Serena Cuoghi. Profesora de Biología egresada de la UPEL. Docente especialista en Dificultades de Aprendizaje. Experta en PNL y Superaprendizaje. Desempeño en Ciencias Biológicas, e investigadora en Biodescodificación.

Trabajo publicado en: Abr., 2024.

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