Definición de Herida

Una herida es una lesión que puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo. Este tipo de lesiones son consecuencia de traumatismos, golpes, caídas, accidentes o incluso acciones como entrar en contacto con agentes químicos o físicos, como ácidos fuertes o el fuego respectivamente.

Las heridas pueden ser de varios tipos, cuando afectan la piel se conocen como heridas abiertas, mientras que cuando la lesión afecta a tejidos profundos pero no hay ruptura de la superficie de la piel se denominan heridas cerradas, igualmente pueden tener un tamaño que va desde pocos milímetros a varios centímetros tanto de longitud como de profundidad.

La gravedad de una herida no necesariamente se encuentra relacionada con su tamaño

Una herida extensa en un miembro puede no ser tan grave como una pequeña herida en la ingle, la gravedad se relaciona mas bien con hechos como lesiones de estructuras vitales como los vasos sanguíneos o la perforación de membranas como la pleura y el peritoneo. Este tipo de heridas se conocen como heridas complicadas.

Las heridas sobre trayectos de vasos sanguíneos pueden acompañarse por lesión de la arteria o las venas que por allí transcurren originándose así una hemorragia, por lo general la sangre de origen arterial se reconoce porque sale a presión de forma regular en relación con los latidos cardiacos y es de color rojo brillante, la sangre venosa por su parte es masa oscura y el sangrado tiende a ser continuo en vez de pulsátil.

Las lesiones en el tórax pueden afectar la membrana que reviste la parte interna de las costillas conocida como pleura, cuando esto ocurre se colapsa el pulmón originándose dificultad respiratoria, esto es debido al hecho de que el tórax trabaja con presión negativa y la apertura de un orificio permite la entrada de aire lo que imposibilita la normal expansión del pulmón.

Cuando la herida se encuentra a nivel del abdomen puede perforar al peritoneo o incluso a una víscera hueca, principalmente le colon que es la más superficial lo que lleva al desarrollo de un cuadro de gran gravedad como lo es la peritonitis.

Tipos de heridas

Existen varias formas de clasificar las heridas, según la forma en que estas se producen pueden ser de cuatro tipos principales:

Contusas. Ocurren por un golpe o traumatismo directo, en muchos casos las heridas contusas son cerradas, no existiendo un daño visible en la indemnidad de la piel sino en órganos o estructuras profundas, las más superficiales producen hematomas, las más profundas pueden afectar a huesos, órganos o incluso vísceras, originando fracturas, hemorragias internas, ruptura de órganos o incluso desprendimiento de los mismos.

Penetrantes. Son debidas al efecto de un objeto sobre la piel, como es el caso de un cuchillo, un trozo de vidrio o fragmentos o partes de un objeto, por lo general ocasionan daño extenso al tejido. Este tipo de heridas incluyen las quemaduras, heridas por proyectil de arma de fuego, puñales y las que se presentan durante accidentes automovilísticos o caídas en las que cualquier objeto puede penetrar la piel.

Punzantes. En este caso la herida es producida por un objeto con punta como un clavo, estas heridas deben ser sometidas a exploración y observación cuidadosa ya que es posible que se asocie con importantes lesiones internas.

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