Definición de Puritano

El término puritano se emplea con recurrencia para referirse a aquello propio o vinculado con el puritanismo.

Propio o asociado al puritanismo

En tanto, el puritanismo fue una postura radical que surgió dentro del Protestantismo en Inglaterra, luego de la Reforma y durante el Reinado de la Reina Isabel I, siglo XVI para ser más precisos.

Características de este movimiento surgido en Inglaterra y que seguía la propuesta calvinista

El Puritanismo no comulgaba ni con la Iglesia Católica ni con la propuesta de la Iglesia Anglicana, más bien rechazaba a ambas. Es que un sector importante dentro de la Iglesia de Inglaterra creía que la ruptura definitiva con la Iglesia Católica todavía no se había terminado de concretar, ya que parte de las creencias y de la liturgia seguían siendo las mismas entre una y otra, así lo marcaba. Y por el lado del anglicanismo tampoco había acuerdo ya que este sector lo consideraba demasiado próximo al poder real inglés y en muchas circunstancias entonces arbitrario.

Estaba mayormente conformado por calvinistas ortodoxos que no permitían en sus rituales ningún tipo de condimento vinculado al catolicismo.
La Biblia era respetada con rigurosidad y creían que el camino acertado era alejarse de las comodidades que brinda el mundo. Por ejemplo, ocio y lujo eran mal vistos por los seguidores de esta creencia, ahora bien, sí defendían y promovían la actividad comercial como medio de sustentación y asimismo consideraban que el éxito en el comercio era una clara recompensa que llegaba de Dios por haber hecho bien las cosas.

Alejarse de los lujos y acercarse a la fe

El dinero era importante por supuesto, pero en tanto y cuanto se lo invirtiese en cuestiones consideradas útiles y en actividades benéficas, por supuesto no aceptaban gastarlo en lujos ni en cuestiones inservibles.

El dogma que sostenía y proponía esta nueva creencia era la autoridad suprema de Dios por sobre todas las cuestiones humanas y que el hombre debía ser reformado a través de la gracia de Dios. Una vez que Dios mostrase misericordia al hombre, éste debería confiar en el perdón divino y como devolución a él debía seguir una vida obediente y humilde,

Entre sus principales características se cuentan: énfasis en el estudio privado de la Biblia, todos deberían lograr educación e ilustración porque solo así podrían leer y comprender la Biblia, sacerdocio para todos los creyentes, llevar una vida simple y que ello se manifieste en la adoración, en el vestir y en las imágenes, no sumarse a la celebración de las festividades tradicionales, guardar un día en la semana como indica la Biblia.

Respecto de la jerarquía eclesiástica, algunos la sostenían y respetaban, en cambio otros buscaban su reformulación al modelo presbiteriano, el cual se basa en las enseñanzas que propone la Biblia y tienen a Juan Calvino, uno de los promotores de la Reforma Protestante, como el comentarista más destacado.

Padecieron persecuciones

Como todo movimiento minoritario tuvo que padecer discriminación y por supuesto persecuciones.
Las causas de las mismas estuvieron vinculadas a la postura política que adoptaron los puritanos, a favor del sistema de gobierno parlamentario y en contra del absolutismo monárquico.
Esta situación generó que muchos puritanos fuesen perseguidos y tuviesen que exiliarse en otros países europeos como por ejemplo Holanda, y también América del Norte fue el destino de tantos otros.

Aquellos que se fueron a la parte norte del continente americano fueron el germen de las colonias que tiempo más tarde conformarían uno de los de países más poderosos del mundo como lo es Estados Unidos.

Partidario del Puritanismo

Por lo expuesto es que otro de los usos que presenta el término puritano es para referirse a un partidario o seguidor del mencionado movimiento Puritanista.

Persona que sigue a rajatabla las normas morales

Y en el lenguaje corriente solemos emplear la palabra puritano para referirnos a aquella persona que sigue y respeta las normas morales muy estrictamente, casi hasta con exageración en algunas situaciones.

Podemos ejemplificar este sentido con casos concretos, por ejemplo, aquella persona que evita decir malas palabras o expresiones injuriantes; aquella mujer que descarta entre su vestimenta ropas provocativas, que sugieran o muestren su cuerpo, tal es el caso de escotes pronunciados o minifaldas.

Comúnmente este perfil de personas suelen ser muy introvertidas, se visten de manera muy formal, no exhiben sus cuerpos, son muy pudorosas en todo sentido, en lo que se ponen y en lo que hablan, y también suelen tener una intensa fe religiosa que los lleva a practicar la religión que profesan de modo cotidiano y con un gran compromiso.