Definición de Saber
La palabra saber la usamos extendidamente en nuestro idioma para designar la sabiduría, el conocimiento que alguien dispone en una materia, tema o ciencia.
Conocimiento y sabiduría que una persona dispone en un tema o materia
“Su saber no tiene límites.”
Cuando alguien sabe algo, o sea, ha aprendido un conocimiento, podrá tomar decisiones acertadas y útiles que le serían prácticamente imposibles sino contase con ese saber.
Una capacidad humana con gran valor
Sin lugar a dudas, el saber, es una característica intrínseca al género humano, que ha sido abordada desde diversas perspectivas de la ciencia física y social.
La disposición de conocimientos ostenta un valor muy relevante en nuestra sociedad porque justamente son ellos los que podrán abrir las puertas a un futuro mejor; el conocimiento, como bien decíamos, nos saca de la ignorancia pero además nos aporta la capacidad de poder resolver problemas de modo satisfactorio.
Una persona puede lograr el saber, es decir, el conocimiento sobre algo, a través de su experiencia, o sea, del contacto con aquello que se conoce, por la educación recibida, es decir, adquiere a través de la enseñanza que alguien le profiere el conocimiento práctico y teórico de un tema o realidad.
Cabe destacarse que los seres vivos obtenemos conocimientos y saberes referentes a nuestro entorno gracias a facultades como ser: vegetativa, sensitiva y racional.
Mientras tanto, en los seres humanos, la facultad racional produce el saber por conceptos haciendo viable el lenguaje y también la conciencia acerca de lo que es verdad.
Vale mencionar que este conocimiento vía conceptos es solamente viable en los hombres por la facultad del entendimiento.
Ahora bien, la experiencia también nos brinda a los seres humanos saber y conocimientos, aunque, se trata de un conocimiento más bien subjetivo de aquel que provee la experiencia.
Por caso, será verdadero para el que lo vive.
La principal diferencia con el conocimiento por conceptos que mencionábamos líneas arriba es que los conceptos al ser inmateriales, por tanto independientes de la experiencia, son per se una información evidente.
Fuentes del saber
El saber siempre se desarrollará en un contexto, tal es el caso de la cultura de una determinada sociedad y podrá provenir de diversas fuentes: intuición (el conocimiento que nos llega inmediatamente del contacto con el objeto), experiencia (el saber resulta de la experiencia que se atraviesa), tradición (el conocimiento va transmitiéndose de generación en generación), autoridad (cuando el conocimiento parte de una fuente referente en materia política, moral, científica) y ciencia (la serie de conocimientos racionales, verdaderos y posibles que se obtienen de modo metódico).
La del saber es una actividad constante y propia de los individuos y por ello todo el tiempo estamos absorbiendo y procesando la información que obtenemos de nuestro entorno.
La aprehensión de los conocimientos implicará diversos procesos cognitivos complejos tales como: percepción, sensación, conceptualización, lenguaje, comunicación, deducción, asociación, entre otros.
La epistemología es la disciplina que se ocupa de estudiar el saber
A la epistemología le cabe el estudio del conocimiento, dado que es la rama de la filosofía que justamente se ocupa de ello.
Esta ciencia es un desprendimiento de la Filosofía y por tanto el tema del saber, siempre, desde tiempos milenarios, estuvo presente y ocupando al hombre y a la filosofía.
Justamente han sido los filósofos clásicos y más populares los que se ocuparon especialmente de explicar y analizar cómo es el proceso de conocimiento de los hombres.
El saber para Platón y Aristóteles
Así es que dos iconos de la Filosofía como fueron Platón y Aristóteles abordaron este tema desde sus propias creencias.
Platón hablaba de un mundo ideal que estaba representado por las ideas y que supone lo real y verdadero, mientras que el otro mundo, el sensible, es una representación de esa realidad que no supone de ningún modo lo auténtico, sino todo lo contrario.
Y por su parte, Aristóteles, distingue entre la esencia, las sustancias y los accidentes, proponiéndonos una visión más realista del saber.
Con el tiempo, otros filósofos fueron avanzando en las consideraciones como por ejemplo Immanuel Kant que hablará de estadios en el aparato de conocimiento del hombre.
El concepto que se contrapone es el de ignorancia, que implica la ausencia de conocimientos respecto de una cuestión, materia o ciencia.
Otros usos
Y también la palabra saber se utiliza de modo extendido en nuestro idioma para referir diversas cuestiones o situaciones como ser: tener la noticia o la certeza de algo, estar especializado en algún tema, disponer de una habilidad, como sinónimo de resignación, contar con astucia, el sabor que ostenta algo, cuando una cosa se asemeja a otra, nos la recuerda por algo.
Trabajo publicado en: Jul., 2013.
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