Definición de Sortilegio

El término sortilegio es empleado popularmente para referir dos cuestiones. Por un lado, a aquella adivinación que se lleva a cabo a través de medios mágicos y por otra parte al hecho consumado de un embrujo, hechizo o encanto.

En tanto, por estos días, el término es mayormente empleado como un sinónimo del término hechizo y el otro uso quedó más relegado, ya que para referir la cuestión de la adivinación se usa el término videncia.

La palabra sortilegio tiene su origen en el latín, proviniendo de Se Tortis (suerte) y Legis (lectura), que refiere al arte de leer las señales que se suceden antes de un determinado evento, si bien implica adivinación, principalmente, el sortilegio propone interpretar los sucesos que ocurrirán en el futuro a través de aquellas señales que se manifiestan en nuestro presente.

El sortilegio incluye todas las mancias, es decir, la cartomancia o tarot (deducción mediante el uso de naipes o cualquier otro juego similar), la quiromancia (interpretación a través de la lectura de la palma de la mano), cafemancia (adivinación mediante la borra del café u otras infusiones), la cleromancia (interpreta mediante habas, conchas), bibliomancia (selección al azar del pasaje de un libro, interpretándose el resultado de acuerdo a una pregunta), nigromancia (conocimiento de situaciones por la invocación a los espíritus de los muertos) y la aeromancia (observación de los fenómenos atmosféricos).

Sin excepción, todas las culturas y pueblos que han formado y forman parte de nuestro planeta han practicado el sortilegio a través de los diversos métodos que han encontrado a su alcance, desde los más simples y populares, hasta los más sofisticados.

Se cree que una de las causas del nacimiento del sortilegio fue la necesidad de interpretar relaciones causales, que no eran evidentes per se y que ante la ausencia del método científico en tiempos bien remotos, resultaban ciertamente complejas e imposibles.