Definición de Surf

Si tenemos en cuenta que el agua ocupa dos terceras partes de la superficie terrestre, es lógico que el ser humano haya ideado tipo de sistemas para moverse por el medio acuático: canoas, piraguas, lanchas, barcos y un largo etcétera de medios de transporte. El surf no es un medio de transporte acuático, sino que se trata de una forma de entretenimiento en la que los practicantes se deslizan sobre las olas cercanas a la costa.

Para practicar el surf se necesita, como es lógico, una tabla. La elección de una tabla u otra depende del tipo de oleaje, el peso del surfista y las características de las olas. Sus medidas vienen indicadas en la propia tabla en pies y pulgadas. Para que la tabla se deslice correctamente es necesario que tenga unas medidas adecuadas y un grosor determinado.

Las que se emplean para iniciados a este deporte tienen que ser más anchas y con mucho volumen, pues de esta manera el surfista tiene una mayor estabilidad

La mayoría de ellas se fabrican con algún tipo de caucho para así evitar golpes. Los deportistas más avanzados emplean tablas más ligeras y hechas con fibra de vidrio.

Lo importante en cualquier tabla es que se adapte bien al movimiento de las olas y que sea lo más maniobrable posible. Las tablas que terminan en punta son idóneas para que las maniobras de los surfistas sean precisas.

El reto de ponerse de pie sobre una tabla

Antes de empezar a surfear en el agua, los iniciados deben practicar los movimientos en la tabla sobre tierra firme. En este sentido hay que practicar ejercicios de colocación de los pies, equilibrar correctamente los puntos de apoyo y tener el tronco recto. Ya en el agua, los principiantes tienen que practicar la puesta en pie sobre la tabla para tener una posición correcta y evitar la caída al agua.

Cultura del surf

Esta actividad, ya sea en su vertiente lúdica o deportiva, tiene su propia dimensión cultural. En este sentido, los surfistas tienen sus foros de debate en la red, pintan y cuidan sus tablas y, sobre todo, buscan los lugares idóneos donde puedan encontrar la ola perfecta.

Se inició en Hawaii como un pasatiempo entre los nativos. En este archipiélago existía la costumbre de deslizarse sobre las olas con una tabla para ganarse el respeto de los demás.

El surf se hizo popular en la década de 1930 en California, donde aparecieron los primeros clubs y campeonatos. En la década de 1970 se inventó el traje de neopreno y la cultura del surf se convirtió en un fenómeno global.

A partir de las nuevas tecnologías, es posible hacer una predicción de las grandes olas con una semana de adelanto y este avance ha supuesto una auténtica revolución entre los surfistas.

Fotos: Fotolia – adamfahey / goodluz