Definición de Telúrico
Proviene del latín tellus, que quiere decir tierra. En cuanto a su uso, puede referirse a los movimientos internos de la tierra o a un estilo literario, el telurismo.
Movimientos telúricos
La geología estudia los movimientos internos de la Tierra. El interior de nuestro planeta presenta tres capas concéntricas: el núcleo, el manto y la corteza terrestre. Esta última capa está formada por grandes estructuras que se mueven en diferentes direcciones e intensidades y esta circunstancia origina diferentes movimientos y choques. Algunos de estos movimientos o sismos son muy destructivos y son conocidos como terremotos.
Los movimientos internos de la Tierra o movimientos telúricos son extremadamente lentos en situación normal (2,5 cm al año) y, por lo tanto son imperceptibles. Sin embargo, cuando las placas tectónicas se mueven en dirección opuesta se producen temblores o terremotos de cierta intensidad.
Los sismólogos empezaron a estudiar los movimientos telúricos a partir de los efectos observables y de la intensidad de los temblores. Con el paso del tiempo se centraron en los procesos geológicos internos. En cualquier caso, un sismo o terremoto es la consecuencia de la energía liberada en el interior de la Tierra.
En la creación literaria
Algunas obras literarias son consideradas telúricas y por este motivo se habla del telurismo narrativo. El factor telúrico podría entenderse como el efecto que tiene lo terrenal y territorial en la descripción de la atmósfera narrativa.
La literatura hispanoamericana tiene una dimensión telúrica evidente. En este sentido, muchas novelas y cuentos describen las fuerzas internas de la naturaleza como un elemento que condiciona el temperamento de los individuos. Así, la selva tropical o la pampa tienen su propia energía interna y esa fuerza acaba filtrándose misteriosamente en las relaciones humanas.
En la primera mitad del siglo XX surgió en Hispanoamérica una corriente literaria conocida como la novela telúrica. Esta tendencia tiene varias características
1) el interés por los espacios rurales y el paisaje urbano,
2) los temas sociales y
3) la relación entre el individuo y la sociedad que le rodea.
El venezolano Rómulo Gallegos, el argentino Ricardo Güiraldes o el colombiano José Eustasio Rivera son algunos de los máximos representantes de la novela telúrica, una corriente que es considerada como el precedente del realismo mágico.
Fotos: Fotolia – Xuejun li / BillionPhotos
Trabajo publicado en: Nov., 2016.
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