Definición de Traducianismo
La cuestión del alma humana ha sido valorada desde dos visiones generales: como un principio vital o como un principio racional. Asimismo, filósofos, teólogos y científicos han planteado todo tipo de reflexiones sobre la naturaleza del alma.
Una de las corrientes teológicas que ha dado una respuesta sobre ello ha sido el traducianismo. Desde un punto de vista histórico los principales teólogos de esta corriente fueron Apolinar y Tertuliano, ambos pertenecientes al Cristianismo primitivo que tuvo lugar en los primeros siglos de la era cristiana. Hay que indicar que el luteranismo también defiende la tesis central de este pensamiento.
Creacionismo versus traducianismo
En la teología cristiana el creacionismo es la corriente mayoritaria. Según ella, todo lo que existe, incluida el alma humana, es una creación de Dios. Así, el alma no es algo preexistente, tal y como sostenía Platón, sino que Dios la ha creado ex nihilo, es decir, de la nada. En esta línea, Santo Tomás de Aquino afirmaba que la formación del alma en un individuo concreto tiene lugar cuando se producen las condiciones vitales y fisiológicas necesarias.
El planteamiento del creacionismo es negado por el traducianismo. Según esta corriente, las almas no son creadas por Dios a partir de unas condiciones, sino que el alma se trasmite de padres a hijos a través de un proceso de generación. En este sentido, un individuo posee una dimensión espiritual y vital que viene dada por la herencia de sus padres, lo cual implica que el cuerpo y el alma están íntimamente ligados.
Desde el punto de vista del creacionismo, la transmisión del alma de padres a hijos carece de sentido, pues algo inmaterial y espiritual no puede materializarse en un cuerpo físico.
Desde el planteamiento oficial de la Iglesia católica el traducianismo es una falsa opinión
En varios documentos promovidos por el catolicismo, especialmente algunas encíclicas papales, se afirma que el traducianismo se opone a la idea del pecado original que aparece en la Biblia y, por lo tanto, esta interpretación del alma humana es contraria a un dogma central del catolicismo.
La cuestión del alma presenta múltiples interrogantes sobre los cuales no hay respuestas definitivas
En el caso de que exista el alma humana, los interrogantes que hay sobre ella son muy diversos. Cabe preguntarse sobre su origen, cuál es su destino, si desaparece tras la muerte o pervive, si está formada por diferentes partes o si todos los seres vivos tienen un alma.
En la perspectiva de la teología cristiana, es Dios quien ha dotado al hombre de un espíritu o alma inmortal que nunca muere.
Foto: Fotolia – cyco1976
Trabajo publicado en: Abr., 2018.
Escriba un comentario
Contribuya con su comentario para sumar valor, corregir o debatir el tema.Privacidad: a) sus datos no se compartirán con nadie; b) su email no será publicado; c) para evitar malos usos, todos los mensajes son moderados.