Significado de violencia Definición, elementos, y clasificación

Definición formal

La violencia se refiere a todo acto agresivo que se realiza de manera intencionada y que tiene como finalidad de dañar la integridad de una tercera persona. El año 2022 fue catalogado como el año más violento de la historia de México; sin embargo, este no es un evento aislado, en Estados Unidos desde enero hasta mayo de 2023 se contabilizaron 199 tiroteos (el año anterior solo hubo 100); en Europa la guerra Rusia-Ucrania ha captado los reflectores, en Medio Oriente el conflicto de Palestina e Israel sigue cobrado la vida de miles de personas.

La violencia es una problemática que se mantiene latente, pues si bien poco a poco se han ido superando actos y épocas violentas, asociadas por ejemplo con hechos de esclavitud o de genocidio, la realidad es que otras expresiones se han manifestado cada vez con más frecuencia. Por lo tanto, para poder hacerle frente, es necesario conocer qué es la violencia y como podemos categorizarla.

Conceptualizando la violencia

Como ya ha venido siendo costumbre en las ciencias sociales, una de las principales problemáticas al abordar un fenómeno o constructo es tratar de llegar a un acuerdo sobre como definirlo conceptualmente. En el caso de la violencia podemos encontrar las siguientes definiciones:

• La violencia es un ataque directo y corporal contra otras personas, el cual se caracteriza por ser brutal, exterior y doloroso. La fuerza es empleada de manera voluntaria para dañar a alguien

• Uso de la fuerza de manera abierta o encubierta con el objetivo de obtener de otros el consentimiento coaccionado

• Uso de la fuerza para dañar a otros

Estas tres definiciones parecen tener dos elementos en común: 1) El uso intencionado de la fuerza y 2) La finalidad de dañar a otros. A pesar del punto de convergencia que poseen dichas definiciones, en realidad son insuficientes en el intento de explicar la totalidad de los fenómenos que componen a la violencia. Particularmente reducen la violencia a un acto físico, por lo que actos verbales o psicológicos podrían quedar fuera de esta definición.

Así, San Martin propone que la violencia es un acto agresivo que se encuentra determinado por la influencia de factores socioculturales y que la dotan de una intencionalidad dañina. Esta definición, resalta por dos elementos, el primero es que no es determinista en la expresión de la conducta; la segunda es que incluye el carácter sociocultural, es decir, concluye que dicha expresión es modificable en función de la cultura. Del mismo modo, es necesario diferenciar entre agresión y violencia; tal como hemos mencionado hasta ahora, la violencia es una acción intencionada, mientras que, por el contrario, la agresión es una respuesta innata ante ciertos estímulos, y que incluso podríamos decir tiene un carácter más biológico.

Clasificación

Una vez comprendido a que nos referimos con violencia, es posible realizar una clasificación en función de sus características. En esta línea, hay quienes consideran que dicha clasificación es innecesaria, pues “la violencia es violencia” o “la violencia no tiene género” sin embargo, la clasificación permite entender que mecanismos se encuentran involucrados y que elementos son necesarios al momento de desarrollar estrategias de intervención que reduzcan su prevalencia.

• Violencia activa y pasiva: La activa es aquella que se produce por la acción de una persona (e.g., un ataque físico o verbal) mientras que la pasiva se refiere a la omisión de una acción que conduce a la alteración de la integridad de una persona (e.g., la negligencia médica)

• Violencia en función del daño causado: Así tenemos violencia física (e.g., golpes), violencia psicológica (e.g., comentarios hirientes), violencia sexual (i.e., toda acción con una connotación sexual) y violencia económica (i.e., uso ilegal de los recursos económicos de una persona)

• Violencia según el tipo de víctima: incluye la violencia contra la mujer, violencia de género, violencia infantil, violencia contra adultos mayores.

• Violencia en función de la situación: Aquí residen la violencia en el hogar (i.e., realizada y dirigida hacia los miembros de una familia), violencia laboral (i.e., realizada en el trabajo, habitualmente por parte del empleador a sus empleados) y violencia escolar (producida en las escuelas, habitualmente entre estudiantes o de parte del cuerpo docente hacia al estudiantado, aunque en recientes años los y las docentes han sufrido también violencia por parte del estudiantado y/ de sus tutores) y violencia cultura (i.e., la cual se expresa en función de usos y costumbres de una cultura, el caso más claro es la mutilación genital)

• Violencia según el agresor: Podemos encontrar a la violencia perpetrada por pandillas, grupos terroristas y/o grupos del crimen organizado.

Por supuesto que se podría ser aún más específico con dichas categorías, por ejemplo, en la violencia terrorista puede diferenciarse entre aquella que es realizada con un fin político o con un fin religioso, sin embargo, esta profundización no corresponde al presente texto; aun así, es necesario mencionar que estas categorías no son excluyentes y pueden tener puntos de convergencia.

Fuentes consultadas:
San Martín Esplugues, J. (2007). ¿Qué es la violencia? Una aproximación al concepto y a la clasificación de la violencia. Revista de Filosofía, (42), 9-21. Martínez Pacheco, A. (2016) La Violencia. Conceptualización y elementos para su estudio. Política y Cultura, (46), 7-31.