Definición de Vivero

Un vivero es una infraestructura agrícola destinada a la producción de plantas, que pueden ser forestales, frutales u ornamentales. Cada tipo de vivero tiene un objetivo determinado. El vivero forestal está destinado principalmente a la producción de madera. Los viveros de árboles frutales se orientan a la obtención de frutos. Los de tipo ornamental están enfocados a la decoración de jardines, parques o espacios urbanos de interior.

El diseño de un vivero de plantas

El primer aspecto que debe considerarse es la elección del espacio y su ubicación. Este aspecto es relevante, ya que de él dependen una serie de cuestiones: la distancia al destino final de las plantas, la disponibilidad de la mano de obra, el clima, las características del suelo, el recurso del agua o la exposición a la luz. Cada uno de estos aspectos resulta vital para la optimización de un vivero. Por otra parte, a la hora de diseñar un vivero es necesario definir el tamaño más adecuado para este tipo de instalación.

Otros tipos de viveros

Si bien los viveros de plantas son los más comunes, no hay que olvidar que también hay otras modalidades. Debido a las limitaciones pesqueras, se han creado los viveros de peces, de crustáceos o incluso para producir gusanos de pesca o algas destinadas a la industria farmacéutica. Existen igualmente los viveros de caracoles, que también son conocidos como criaderos.

En todas sus modalidades y variantes estas instalaciones tienen un objetivo en común: optimizar la producción de tal manera que no dependa de los factores naturales tradicionales.

Los viveros en el ámbito empresarial

Un vivero de empresas es una infraestructura cuya objetivo es facilitar la actividad empresarial a los emprendedores. Hay que tener en cuenta que los emprendedores inician su actividad con escasos recursos y para que puedan disponer de una plataforma efectiva y útil se crean estos espacios.

Sin embargo, los viveros de empresas son algo más que un espacio físico con despachos, líneas telefónicas, salas de reuniones y mobiliario, ya que suelen incorporar otros servicios complementarios, como la asistencia comercial o el apoyo de los organismos públicos.

En el mundo empresarial los viveros son también conocidos como incubadoras. Al margen de la denominación, en estos recintos se intenta crear un clima de innovación. De esta manera, se fomenta el surgimiento de nuevas empresas y se contribuye a la creación de empleo. Una clasificación de los viveros de empresas sería la siguiente: aquellos promovidos por el sector público, los corporativos y los que combinan lo público con lo privado.

Fotos: iStock – Leonardo Patrizi / michaelpuche