Batalla de Pichincha - Definición, Concepto y Qué es
Periodista esp. e investigador
Pese a que militarmente, la Batalla de Pichincha no tiene una gran relevancia en el contexto de las Guerras de Independencia latinoamericanas, sus consecuencias geopolíticas sobrepasan el alcance de la derrota militar española, dando paso a la independencia de Ecuador.
La Batalla de Pichincha se libró el 24 de mayo de 1822 entre tropas españolas (el llamado bando Realista) por una parte, y un ejército combinado de la Gran Colombia y el Perú por la otra, con el objetivo de mantener el dominio sobre Quito y Guayaquil los primeros, y de conquistarlas o liberarlas los segundos.
En 1820 se habían producido serios reveses para los realistas, como es el caso de la Batalla de Boyacá y el alzamiento de Guayaquil. La batalla de Pichincha vendría a ser la continuación lógica de este último, y un paso más en un proceso que ya no tenía vuelta atrás.
En términos bélicos, no supuso un gran despliegue de hombres y armas, con un ejército combinado de peruanos y colombianos que sumaba unos 3.000 hombres, contra un número aproximadamente equivalente de realistas. Ambas tropas estaban respaldados por un limitado número de piezas de artillería. En las tropas americanas también se contaban voluntarios argentinos y chilenos.
El objetivo de los hombres del General Sucre era tomar Quito, objetivo conocido por el comandante español, general Melchor Aymerich.
Este último decidió blindar los pasos de montaña que llevaban a Quito con la artillería apostada de forma que pudiera dominarlos.
Dicha disposición llevó a las tropas libertadoras a esquivar el dispositivo defensivo, por lo que Sucre ordenó la marcha por la ladera del volcán Cotopaxi.
Para evitar ser copado por su retaguardia y aislado de Quito, Aymerich ordenó a sus tropas que se replegaran hacia la ciudad, es de suponer que esperando un ataque directo.
Sucre quería que sus tropas disfrutaran de la mejor posición de partida, así que les ordenó que escalaran el volcán Pichincha, el cual domina toda la ciudad.
Pese a que era una maniobra que podía darle una ventaja considerable, también tenía sus riesgos. La ascensión empezó amparada por la oscuridad nocturna para cubrir las tropas, que debían estar en posición a la salida del sol. No obstante, el terreno dificultaría la marcha, retrasándola.
Los centinelas realistas apostados en Quito también descubrieron el ascenso de las tropas independentistas, por lo que Aymerich mandó a sus soldados que ascendieran también el volcán para enfrentarse allí a las fuerzas de Sucre.
Cuando despuntó el alba, los soldados de Sucre se vieron sorprendidos por descargas de mosquetes.
Tras parapetarse y recibir refuerzos, no pudieron equilibrar la balanza, dejando la iniciativa en el campo momentáneamente a los españoles, e iniciando una maniobra de repliegue tras fracasar un intento de flanquear a las fuerzas de Aymerich, que disparaban a placer desde posiciones tomadas con tiempo de antelación.
Lo escabroso del terreno dificultaba la llegada de refuerzos, además de las maniobras y de ganar superioridad frente al enemigo, pero estos eran handicaps que también perjudicaban a la fuerza española, que se vio incapaz de ganar una superioridad neta ante los patriotas.
Así, un intento de carga sobre la retaguardia de Sucre por parte de un batallón español, fue rechazado por los refuerzos independentistas, llegados in extremis al lugar de la refriega.
Finalmente, y en un acto de heroicidad, los soldados patriotas lograron romper definitivamente la línea realista.
Las tropas españolas que quedaban se replegaron refugiándose en una pequeña fortaleza, en la que finalmente capitularon a petición de Sucre, quien quería evitar la matanza que suponía un asalto frontal. Aymerich tampoco veía posibilidad de resistencia, así que prefirió evitar que el resto de sus hombres pereciera inútilmente.
Quito y su provincia pasaron a integrarse en la Gran Colombia.
Las guerras de independencia terminarían mucho más adelante, pero Pichincha supuso en cierta forma el despertar nacional de Ecuador, que llevaría a la independencia de Colombia en 1830.
Foto: Fotolia – nida
Trabajo publicado en: Sep., 2018.
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