Definición de Batalla de Trasimeno
Periodista esp. e investigador
Durante las Guerras Púnicas, un nombre brilló con especial destello: el del general cartaginés Aníbal Barca, descendiente de una familia de militares de prestigio reconocido en la antigua República de Cartago.
Las batallas de este gran estratega en la Segunda Guerra Púnica son todavía hoy objeto de estudio en las academias militares. Y entre las varias que destacan encontramos la de Trasimeno.
La Batalla de Trasimeno fue un enfrentamiento armado entre las tropas cartaginesas, sus aliados y mercenarios, contra tropas de la República Romana en el marco de la Segunda Guerra Púnica, y que se saldó con victoria aplastante para los cartagineses.
Trasimeno sigue a la Batalla del río Trebia, en la cual los romanos -y debido a la imprudencia de su comandante- también sufrieron un descalabro por parte de las tropas de Aníbal. Trebia había sido el primer enfrentamiento de envergadura en suelo italiano entre ambos contendientes, lo que convierte al Lago Trasimeno en la segunda batalla de la campaña italiana de Aníbal.
Tras Trebia, Aníbal había burlado a un ejército romano que le esperaba en Arretium (la actual Arezzo en la Toscana), adelantándose a él para emboscarse junto al Lago Trasimeno.
Fue precisamente la persecución romana, que no estaba informada de que Aníbal se había emboscado, la que llevó a la batalla.
Las tropas cartaginesas, formadas mayoritariamente por tropas aliadas y mercenarios, como algunas tribus galas que Aníbal había ido reclutando a su paso por sus territorios, se dispusieron al norte del lago, en un espacio en el que los caminos se convierten en senderos estrechos apretujados entre las montañas por arriba y el lago por abajo.
Una maniobra de distracción, consistente en simular un campamento mucho más al sur, convenció a los romanos de que el ejército púnico se encontraba al sur del río y que podrían superar fácilmente la parte angosta en la cual les esperaban los cartagineses, y que era idónea para tender una trampa a los romanos.
Los romanos fueron muy descuidados, olvidando casi todas las protecciones debidas a un ejército que avanza, y entraron en la boca del lobo sin saberlo y sin preocuparse lo más mínimo.
Una vez los romanos entraron en el desfiladero, los cartagineses les cortaron el paso en ambos sentidos, de forma que quedaron atrapados, y empezaron a atacarlos por todos los flancos.
Al efecto sorpresa conseguido por Aníbal, se sumó el terror provocado en muchos de los legionarios romanos por el agua.
A día de hoy, damos por sentado que prácticamente todo el mundo sabe nadar, algo que no es en absoluto cierto si hablamos de la antigüedad clásica.
De hecho, buena parte de las 15.000 bajas mortales que sufrieron los romanos (a los que hay que añadir 10.000 o 15.000 prisioneros en manos cartaginesas, contra solo 1.500 o 2.000 muertos entre los soldados de Aníbal) lo fueron por ahogamiento al intentar escapar por el lago de la furia de los soldados que luchaban por Cartago.
Los romanos no pudieron adoptar ninguna formación de batalla, por lo que esta se convirtió en, simple y llanamente, una pelea por salvar las vidas. Divididas en tres bolsas por el ataque cartaginés, solamente la parte de vanguardia pudo salvar una parte de sus efectivos.
Hasta el mismo comandante de las tropas romanas, el cónsul Cayo Flaminio Nepote, murió durante el curso de la batalla.
Para culminar el descalabro, la caballería del otro ejército consular, el del cónsul Cneo Servilio Gémino perdió toda su caballería, que fue sorprendida por su homóloga púnica cuando iba a reforzar el dispositivo del ejército de Flaminio, sin saber que este estaba siendo aniquilado en el lago.
Las consecuencias de la batalla se hicieron sentir especialmente en Roma, que nombró dictador a Quinto Fabio Máximo, y adoptó militarmente una política de tierra quemada y hostigamiento con respecto al ejército de Aníbal, evitando todo enfrentamiento a campo abierto.
Dicha política saltaría por los aires en la Batalla de Cannas, pero esa, ya es otra historia…
Foto: Fotolia – eddy007
Trabajo publicado en: Feb., 2018.
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