Definición de Calculadora Científica

Algunas operaciones matemáticas son sencillas y para realizarlas solo es necesario un cálculo mental, un lápiz y un papel o bien una calculadora convencional. Sin embargo, ciertas funciones matemáticas más complejas pueden ser resueltas con una tecnología más avanzada, la calculadora científica.

Características generales

Estos calculadores incorporan las funciones más comunes, como la suma, la resta, la división o la multiplicación. De esta manera es posible calcular porcentajes o proporciones a través de una simple regla de tres.

En su parte superior estas calculadoras incorporan una serie de teclas con las que se puede realizar distintas funciones adicionales: operaciones con fracciones, funciones trigonométricas, unidades derivadas, conversión entre unidades (por ejemplo, de pulgadas a centímetros), etc. En el caso de realizar operaciones con unidades de tiempo, es posible sumar horas, minutos y segundos. Se usa igualmente en funciones estadísticas, como la media o la varianza.

En la esfera del álgebra también hay opciones específicas (por ejemplo, ecuaciones lineales o de primer grado). Por otra parte, estos dispositivos ya llevan incorporados ciertas constantes de la física y de la química y gracias a ello es posible obtener su valor.

Esta herramienta se usa habitualmente en procedimientos de tipo matemático o físico, así como en todas aquellas disciplinas asociadas a la ciencia. Como es lógico, se trata de un dispositivo de gran utilidad en el ámbito académico. En la actualidad las calculadoras científicas compiten con otras alternativas, como herramientas web o aplicaciones móviles.

Las calculadoras científicas ofrecen ventajas evidentes, pero no pueden usarse sin una orientación previa

Estos dispositivos proporcionan dos ventajas estratégicas: ahorran mucho tiempo a la hora de realizar operaciones y sus múltiples funciones suponen un disminución significativa de los cálculos matemáticos. Sin embargo, para usarlas correctamente es necesario emplear una metodología adecuada.

Desde un punto de vista educativo

El uso de las calculadoras científicas en el ámbito académico es una cuestión que genera un cierto debate. Para algunos, se trata de una herramienta válida pero que no debe sustituir al proceso de razonamiento. En este sentido, muchos docentes defienden su uso siempre y cuando se complemente con las explicaciones tradicionales. En otras palabras, se trata de un dispositivo útil cuando el usuario sabe qué operación está realizando. Como cualquier otra herramienta tecnológica, esta tiene sentido cuando sirve de apoyo al proceso de pensamiento.

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